
Morelia, Michoacán (MiMorelia.com).- Controlar los niveles de glucosa en la sangre es esencial para prevenir complicaciones crónicas en la salud, especialmente en personas con diabetes o resistencia a la insulina. En este contexto, una fruta mexicana emerge como una aliada poderosa: la tuna.
De origen nacional y reconocida por su sabor refrescante, la tuna —el fruto del nopal— ha demostrado ser una excelente opción para quienes buscan mantener sus niveles de azúcar estables, gracias a su alto contenido de fibra soluble.
Según estudios, esta fibra actúa ralentizando la absorción de azúcares en el intestino, lo que ayuda a evitar picos de glucosa tras las comidas. Así, incorporar esta fruta en la dieta puede ser beneficioso para pacientes diabéticos, así como para quienes desean prevenir la enfermedad.
Mejora la digestión: Gracias a su fibra dietética, previene el estreñimiento y alimenta la flora intestinal.
Protege el estómago: Sus propiedades antiinflamatorias han sido utilizadas tradicionalmente para aliviar la gastritis y la colitis.
Hidrata sin calorías excesivas: Compuesta en un 85% por agua y con apenas 40 kcal por cada 100 g, es ideal para mantenerse hidratado y controlar el peso.
Aporta minerales esenciales: Rica en calcio, magnesio y fósforo, fortalece huesos, dientes y favorece la producción de colágeno.
Con su combinación de beneficios, la tuna no solo representa una joya nutricional, sino también un orgullo del campo mexicano. Incluirla regularmente en la dieta puede ser un paso sencillo, económico y delicioso hacia una mejor salud metabólica.
RPO