Morelia, Michoacán (MiMorelia.com).- Invisibilidad institucional; falta de políticas públicas y las existentes con desenfoque y dirigidas al racismo; y barreras en la participación y representación en espacios comunitarios, sociales y políticos son algunos de los aspectos que arrojó el "Informe Especial: Diversidad Cultural y Derechos Humanos, situación de la comunidad afrodescendiente en el Estado de Michoacán".
El presidente de la Comisión Estatal de Derechos Humanos (CEDH), Marco Antonio Tinoco Álvarez, refirió que desde el organismo se tenía una deuda de más de una década con este sector poblacional, por lo que se trata de los primeros pasos para reivindicación y no discriminación de los derechos de la población afrodescendiente.
Por lo que puntualizó que es fundamental que se reconozca la lucha histórica en la defensa de sus derechos humanos, pero además que las instituciones modernicen y sean proactivas para que se visibilice a la población afrodescendiente y haya la manera de impulsar políticas públicas que los beneficien.
Fue Fernando Martínez Palomo, integrante de Personal de Agendas y Mecanismos de la CEDH, quien presentó los resultados al precisar que existen desigualdades estructurales y discriminación, así como la falta de datos desagregados y la ausencia de un censo estatal con enfoque étnico racial.
Si bien, dijo, hay un panorama general sobre la situación de la comunidad afrodescendiente en Michoacán reconociendo su riqueza cultural y visibilizando los desafíos que enfrentan en materia de acceso a derechos, inclusión y reconocimiento institucional, quedan pendiente las problemáticas relacionadas a la discriminación por apariencia, falta de empleo, falta de apoyo gubernamental a través de programas sociales, falta de respeto a costumbres y tradiciones, acceso a la educación y salud, y detenciones arbitrarias.
Además, resaltó que se detectó que pocos municipios reconocen oficialmente a su población afrodescendiente en documentos de identidad e institucionales o que una pequeña fracción realiza acciones con enfoque diferenciado para esta población. Inclusive, señaló, casi el 90 por ciento de la población no denuncia por falta de confianza y desconocimiento para el acceso a la justicia.
Por lo que subrayó que es necesario el diseño de políticas interseccionales con participación afrodescendiente, así como la capacitación y educación permanente, toda vez que aseguró que persiste la discriminación racial hacia las personas afrodescendientes de manera estructura, además de la que exclusión limita el desarrollo y acceso a derechos.
En Michoacán, acentuó, persiste la invisibilización institucional, la falta de datos claros y ausencia de políticas públicas con enfoque afrodescendiente.
De acuerdo al Censo de Población y Vivienda 2020 del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI), en Michoacán viven 73 mil 424 personas que se consideran afrodescendientes, de los cuales 36 mil 364 son hombres y 37 mil 060 son mujeres.
Los municipios con mayor concentración son Morelia con 15 mil 874 personas, seguido de Lázaro Cárdenas con 5 mil 778, Uruapan tiene 5 mil 731, Tacámbaro con 4 mil 111, y Zamora con 4 mil 009 personas.
Todos los municipios cuentan con población que se considera afrodescendiente, pero Morelos tiene 8 personas, Copándaro 16, Susupuato 17, Zináparo 22 y Tumbiscatío 27.
RYE