Morelia, Michoacán (MiMorelia.com).- El responsable de la Unidad de Transformación de Alimentos y Biotecnología del Centro de Innovación y Desarrollo Agroalimentario de Michoacán (CIDAM), Carlos Sosa Aguirre, aseguró que ante la caída del 90 por ciento en el precio del agave, los productores michoacanos pueden optar por la transformación de la materia prima para comercializar productos como el jarabe o la inulina, los cuales ofrecen una mayor vida de anaquel.
En entrevista con Mario Hernández para Fórmula Noticias Michoacán, que se transmite de lunes a viernes de 6:00 a 8:00 horas por el 105.1 de FM, Sosa Aguirre recordó que el precio del maguey pasó de estar en un promedio de 20 pesos a solo 4 pesos el kilo.
El día de hoy existen alternativas a la comercialización del agave, tradicionalmente se utiliza para la producción de mezcal y de tequila, pero tiene otras salidas importantes como pueden ser la producción de jarabe de agave e inulina de agave.
Carlos Sosa detalló que estos productos se fabrican en estados como Nayarit, Jalisco y Guanajuato, principalmente, sin embargo, en Michoacán ya hay una planta, específicamente en el municipio de Jiquilpan, en donde se genera tanto el jarabe de agave como la inulina.
En ese sentido, el representante del CIDEM consideró la organización de los productores a través de cooperativas o sociedades que les permitan alcanzar un beneficio en la transformación de la materia prima.
Es una planta particular que está en Jiquilpan, es una planta grande, muy bien puesta, pero probablemente valdría la pena tener otras fuentes de transformación que pudieran transformar estas materias primas, no solamente de un productor sino de diversos productores haciendo especies como de cooperativas o de o de sociedades de producción rural donde pudiera beneficiarse a los productores”Carlos Sosa Aguirre
A la par, invitó a las y los productores de agave a contactar al CIDEM para recibir apoyo o asesoramiento, incluso con algunas plantas, con el objetivo de comercializar su mezcal o agave o para hacer algunas alianzas en caso de optar por transformar su agave. “Después se pueden vender ya con calma porque la vida de anaquel de estos productos, de la inulina y el jarabe, es larga, estamos hablando de años de vida de anaquel”.
Cabe resaltar que la inulina es una fibra prebiótica, la cual al consumirla y al llegar al intestino grueso o al colón es metabolizada por bacterias benéficas (bífidobacterias y algunos lactobacilos), microorganismos conocidos como probióticos. Mientras que el jarabe de agave es una miel o néctar dulce que se utiliza como endulzante.
Finalmente, el especialista recordó que este cultivo de agave es importante ya que tiene un bajo consumo de agua y se puede cultivar en varias partes de la geografía michoacana. Pese a que hay cierta preocupación por temas ambientales, como el que se está convirtiendo en monocultivo, particularmente en los municipios colindantes con Jalisco, aún es una fuente importante y, de acuerdo con la Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural (SADER), tiene gran rentabilidad.
SHA