Morelia, Michoacán (MiMorelia.com).- La gobernadora de Veracruz, Rocío Nahle, insistió en que la causa de muerte de Irma Hernández, maestra jubilada y taxista secuestrada por un grupo armado, fue un infarto tras haber sido violentada, según dictámenes médicos oficiales. “Les guste o no les guste”, sentenció la mandataria durante su conferencia semanal.
La declaración se consideró una minimización del crimen que indignó a la opinión pública. “Después de ser violentada, desgraciadamente padeció un infarto. Esa fue la realidad, les guste o no les guste”, dijo frente a los reporteros reunidos.
Durante la conferencia, Nahle aprovechó para desmarcarse de las críticas por su manejo del caso. “Yo aquí no voy a venir a decirles cómo hagan su trabajo, de ninguna manera. Si allá empezó el nado sincronizado, que ya los conozco bastante bien, está bien, no me voy a detener en trabajar”, expresó, en aparente alusión a la cobertura mediática.
La mandataria estatal compartió el espacio con el médico legista José Eduardo Márquez, responsable de la necropsia, quien detalló los hallazgos forenses. “La necropsia fue análisis interno y externo; pudimos revisar múltiples lesiones en diferentes partes del cuerpo y las alteraciones se centraban en el corazón. La persona fue violentada, es un hecho que no tiene palabras”.
El caso de Irma Hernández Cruz estremeció a Veracruz luego de que se difundiera un video donde aparece rodeada por hombres armados, mientras lanza una advertencia a sus compañeros taxistas: “Con La Mafia Veracruzana no se juega”.
“Mi nombre es Irma Hernández Cruz, manejo el taxi 554. Compañeros taxistas... pague su cuota como debe ser con ellos y dejen de andar de... con los charros que solo los extorsionan... o van a terminar como yo”, se escucha decir a la víctima con rostro visiblemente golpeado.
La mujer fue reportada como secuestrada el 18 de julio y su cuerpo apareció días después. Aunque el gobierno veracruzano sostiene que murió por infarto, activistas y familiares señalan tortura y responsabilidad del crimen organizado, en medio de un clima de impunidad.
RPO