Por: Cristian Ruiz/@crisruizr1
Morelia, Michoacán (MiMorelia.com).- Este viernes el ayuntamiento de Morelia entregará la Presea Generalísimo Morelos a la familia de Agustín Arriaga Rivera, en homenaje al legado de quien fuera gobernador de Michoacán de 1962 a 1968.
Familiares del exgobernante serán quienes honren su memoria y su trabajo, el cual dejó huella en el desarrollo de la entidad con obras como la construcción de la Presa de Infiernillo, el Hospital Infantil "Eva Sámano de López Mateos", la Escuela Normal Urbana Federal y la Unidad Deportiva Ejército de la Revolución "Venustiano Carranza".
Nacido en Morelia un 20 agosto de 1925, Agustín Arriaga Rivera tuvo una destacada participación en las instituciones académicas. Realizó sus estudios profesionales en la Escuela Nacional de Economía de la UNAM y fue presidente de la primera Federación Estudiantil Universitaria Unificada, en 1948. Obtuvo su título profesional con mención honorifica, en 1951.
Desde joven, el moreliano comenzó a involucrarse en la política mexicana y fue diputado federal por el tercer distrito del estado en la 42 Legislatura del Congreso de la Unión.
Más tarde, fue presidente de la Junta Federal de Mejoras Materiales de Nuevo Laredo, Tamaulipas, en donde se construyó el Puente Internacional, así como una planta potabilizadora de agua, mercados, centros deportivos y escuelas. Posteriormente fue nombrado director del Instituto Nacional de la Juventud Mexicana, mediante el cual se crearon en diversos estados, casas para este sector de la población.
Como gobernador del estado realizó varias obras, sobre todo en los rubros de desarrollo urbano, educación y salud.
En materia de infraestructura y comunicaciones, Arriaga Rivera concretó la construcción de mil 630 Kilómetros de carreteras, sin recurrir a empréstitos, el antiguo Aeropuerto de Morelia (en la actual colonia Guadalupe), la electrificación de 254 poblaciones del estado y la inauguración de las presas El Infiernillo y La Villita.
El primer hospital dedicado a la salud infantil fue construido en su periodo de gobierno (el Hospital Infantil "Eva Sámano de López Mateos) en Morelia, espacio que todavía brinda atención a infantes de todo el estado; además, se construyó el Albergue Tutelar Juvenil y se implementó un modelo de reincorporación de los niños y jóvenes infractores.
Su legado en Morelia consta de obras como los mercados Revolución, Independencia y de Dulces; el rescate y remodelación del Callejón de la Bolsa, hoy conocido como Callejón del Romance, y del Bosque Cuauhtémoc, el cual estaba lleno de casas, pues lo convirtió en un centro de recreación familiar y uno de los principales pulmones de Morelia.
El 18 de junio de 2006 falleció a los 80 años, en compañía de su familia, la cual está orgullosa del legado que dejó en Michoacán.
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