
Ciudad de México (MiMorelia.com).- Los edulcorantes bajos en calorías o sin calorías pueden ser una herramienta útil en el control de peso y enfermedades metabólicas, ya que su seguridad y eficacia han sido avaladas por organismos regulatorios, resultado de diversos ensayos clínicos.
Según una investigación publicada en el sitio de The British Medical Journal, consultada por el Laboratorio de Datos contra la Obesidad (LabDO), estos sustitutos mostraron efectos positivos en el peso, Índice de Masa Corporal (IMC) y niveles de glucemia, además de ser considerados como una opción capaz de disminuir la ingesta de azúcar sin sacrificar el sabor dulce. (1)
Por su parte, la International Sweeteners Association reconoce que las personas con diabetes pueden usar edulcorantes bajos en calorías o sin calorías de forma segura para ayudar a reducir la ingesta total de energía y azúcares sin afectar el control de la glucemia. Y sostiene que una dieta saludable tiene el potencial de mejorar el control de la glucosa, reducir el riesgo de complicaciones diabéticas y mejorar la calidad de vida. (2)
En ese mismo sentido, un metaanálisis de 17 ensayos clínicos difundido por JAMA Network Open, confirmó que los hallazgos de estos estudios sugieren que a mediano plazo, las bebidas endulzadas con sustitutos bajos en calorías son una alternativa viable como estrategia de reemplazo de bebidas azucaradas en adultos con sobrepeso u obesidad que están en riesgo de padecer diabetes o que la padecen. (3)
Estos productos forman parte de los ingredientes más examinados de la industria alimentaria, lo que ha permitido definir con precisión su perfil de inocuidad.
Agencias internacionales y gobiernos de diversos países han avalado su uso. En Canadá, por ejemplo, se estableció que compuestos como aspartamo, sucralosa, eritritol, acesulfame de potasio y polioles —entre ellos sorbitol, maltitol y xilitol— cumplen con normativas estrictas y pueden integrarse en la dieta de personas con diabetes, bajo determinados criterios. (4)
Cabe destacar que el exceso de azúcar se mantiene como uno de los factores de riesgo en el desarrollo de la obesidad, la hipertensión, las complicaciones cardiovasculares y el avance global de la diabetes tipo 2.
1. Toews, I., Lohner, S., Küllenberg de Gaudry, D., Sommer, H., & Meerpohl, J. J. (2019). Association between intake of non-sugar sweeteners and health outcomes: systematic review and meta-analyses of randomized and non-randomized controlled trials and observational studies. The British Medical Journal, 364, k4718. bmj.com/content/364/bmj.k4718
2. International Sweeteners Association. (2023). Know how to manage and prevent diabetes for a better life. sweeteners.org/know-how-to-manage-and-prevent-diabetes-for-a-better-life/
3. McGlynn, N. D., Khan, T. A., Wang, L., et al. (2022). Sweetened Beverages as a Replacement for Sugar-Sweetened Beverages With Body Weight and Cardiometabolic Risk: A Systematic Review and Meta-analysis. JAMA Network Open, 5(3), e220819. jamanetwork.com/journals/jamanetworkopen/fullarticle/2790045
4. Health Canada. (2022). The safety of sugar substitutes. Government of Canada. canada.ca/en/health-canada/services/healthy-living/your-health/food-nutrition/safety-sugar-substitutes.html
RPO