
Morelia, Michoacán (MiMorelia.com).- Comer 20 almendras al día podría ser uno de los hábitos más simples y poderosos para transformar tu salud. Estos frutos secos, además de sabrosos, contienen una mezcla única de nutrientes que benefician desde el corazón hasta la piel, pasando por el cerebro y el metabolismo.
Durante siglos, las almendras han sido valoradas por sus propiedades nutricionales. Hoy, la ciencia confirma lo que la sabiduría popular intuía: un puñado de este superalimento puede marcar la diferencia.
Corazón más fuerte
Las almendras son ricas en ácidos grasos monoinsaturados, similares a los del aceite de oliva, que protegen las arterias. Su contenido de magnesio y vitamina E ayuda a relajar los vasos sanguíneos, reduciendo la presión arterial. Estudios indican que su consumo diario disminuye el colesterol LDL ("malo") hasta en un 10%. Además, la arginina mejora la circulación y previene coágulos.
Aliado del cerebro
Este fruto seco contiene riboflavina (vitamina B2) y L-carnitina, nutrientes que estimulan la función cognitiva. Sus antioxidantes, como la quercetina, protegen a las neuronas del daño oxidativo. Investigadores de la Universidad de Illinois encontraron que su consumo está relacionado con mayor producción de acetilcolina, neurotransmisor clave para la memoria. Incluirlas en el desayuno potencia la claridad mental.
Control de peso
Aunque calóricas, el 15% de sus grasas no se absorben completamente, según la revista Obesity. Su alto contenido de fibra y proteína proporciona saciedad y reduce antojos. El manganeso activa enzimas que queman grasa, mientras que el zinc regula la leptina, hormona del apetito. Un estudio de Nutrition Journal reveló que quienes comieron almendras perdieron hasta 62% más grasa abdominal que quienes consumieron carbohidratos complejos.
Piel más radiante
Veinte almendras cubren el 60% de la dosis diaria recomendada de vitamina E, un potente antioxidante que protege contra los rayos UV. Además, sus polifenoles combaten los radicales libres responsables del envejecimiento. El cobre estimula la producción de colágeno y sus ácidos grasos mantienen la piel hidratada y firme. Eso sí, acompáñalas con buena hidratación para maximizar sus efectos.
Regulan el azúcar en sangre
Gracias a su bajo índice glucémico y su alto contenido de magnesio (76 mg por porción), mejoran la sensibilidad a la insulina. Un metaanálisis de 2022 publicado en Nutrients demostró que las almendras reducen los picos de glucosa postprandial hasta en un 30%. La fibra soluble ralentiza la absorción de carbohidratos, estabilizando los niveles de azúcar.
RPO