Morelia, Michoacán (MiMorelia.com).- Ante representantes de medios de comunicación, la diputada del Congreso de Michoacán, Mayela Salas Sáenz, defendió su iniciativa propuesta el 30 de junio, con la que se pretende prohibir la celebración de corridas de toros, novillos o becerros, así como facilitar inmuebles para que tengan lugar dichas actividades, esto luego de una manifestación en Morelia protagonizada por galleros, taurinos, jaripeyeros, charros, y comerciantes de la industria de la tauromaquia.
Por un lado, la legisladora del Partido del Trabajo (PT) recordó que su propuesta de prohibición no incluye a la charrería, jaripeos y peleas de gallos, al considerar que son ocupaciones que siguen formando parte de las tradiciones mexicanas, no como la taurina que mencionó, es herencia de España.
Asimismo, criticó la tauromaquia por el nivel de violencia que se ejerce contra el animal, señalando tortura, malos tratos y una muerte cruel, agresiones que mencionó, no son un ejemplo para los niños que tienen contacto con ese tipo de espectáculos.
Sobre la manifestación del martes, Salas Sáenz negó que los taurinos sean personas "animalistas" como ellos lo refirieron durante su protesta ante el Congreso del Estado.
De aprobarse la propuesta de la petista, Michoacán sería el sexto estado en cancelar y perseguir legalmente las corridas de toros, junto con Sinaloa, Sonora, Guerrero, Coahuila y Quintana Roo.
En este tenor, la diputada aseguró que la tauromaquia va rumbo a la extinción:
"No solamente aquí en México, sino en todo el mundo porque tenemos que entrar en un tipo de conciencia más amable, más fraternal entre todos porque no podemos seguir así como estamos. Tenemos que entrar a una nueva era donde haya menos violencia, todos queremos eso".
La iniciativa de la petista busca la adhesión de una fracción XI al artículo 66 de la Ley de Derechos y Protección para los Animales en el Estado, para la prohibición total de la tauromaquia. Es de recordar que, durante la lectura de la reforma, Mayela Salas enlistó los artefactos punzocortantes usados por los toreros antes de asesinar al bovino: puya o pica, muleta, puntilla o descabello; todas herramientas que provocan desangramiento.
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