Morelia, Michoacán (Boletín).- Luego de que trascendiera a través de grupos de celular el supuesto ingreso de inspectores foráneos en los domicilios de la capital michoacana bajo el argumento de ser personal de Tesorería, y realizar una actualización del valor del predial, el titular de las arcas municipales, Alberto Guzmán Díaz, desmintió contundentemente que personal de su dependencia ingrese en los domicilios sin una debida acreditación y exhortó a la ciudadanía a estar alerta ante estos hechos.
Guzmán Díaz detalló que desde hace más de un año el ayuntamiento a través de la Tesorería, se encuentra haciendo una revisión y actualización catastral, razón por la cual inspectores de la misma acuden a los domicilios con previa notificación al contribuyente para realizar su trabajo, agregando que estos deben estar perfectamente identificados y acreditados ante los ciudadanos como empleados municipales.
Fue enfático al decir que los inspectores no ingresan a las casas a reserva de que su trabajo demande realizar mediciones en el interior de las mismas, situación que es previamente notificada a los propietarios de las mismas por medio de un oficio, en el que se detalla el día y la hora en que el personal municipal se presentará en su vivienda.
"No estamos entrando a los domicilios sin una notificación previa e incluso la mayoría de los avalúos se están realizando por medio de inspección física en el exterior de los predios con fundamento en la Ley de Catastro del Estado y del Bando del Municipio de Morelia", reiteró.
En este tenor, el funcionario municipal enlistó las actividades que sus inspectores realizan durante esta actualización en los domicilios:
– Llenado de cedula catastral
– Identificar el nombre del propietario
– Identificar la cuenta del predial y la clave catastral
– Verificación del frente del predio
– Dibujo y modificación de construcciones en caso de que se amerite
– Toma de fotografía del frente del predio, con previo consentimiento del contribuyente
Asimismo dejó sentado que los brigadistas no podrán pedir a la ciudadanía gratificación de ninguna índole por sus actividades; solicitar ninguna documentación diferente a la boleta de predial o comprobante de domicilio, ni ofrecer o aceptar servicio de gestoría ante la Dirección de Catastro.
