Morelia, Michoacán (MiMorelia.com). – Por segunda ocasión, el hombre que masacró a 77 personas el 22 de julio de 2011, en Oslo y en la Isla de Utoya, Noruega, promovió un recurso legal donde argumentó que sus derechos humanos están siendo violentados durante su confinamiento en la cárcel de Ringerinke.
Si bien el centro penitenciario cuenta con condiciones de estancia óptimas como áreas verdes, gimnasio, biblioteca, celda con baño privado, pantalla de televisión y videojuegos, así como actividades recreativas al aire libre, Anders Brievik, autor de la matanza, consideró que su confinamiento solitario implica un “castigo inhumano”.
No obstante, la fiscalía de Noruega, ha solicitado la desestimación de este argumento a la corte de ese país, toda vez que tanto el personal penitenciario, como el psiquiatra de Brievik, coinciden en que no presenta indicios de depresión ni deterioro físico o psicológico derivado del aislamiento.
Asimismo, los fiscales consideraron que modificar las condiciones de la condena que purga el implicado, podrían representar un riesgo de reincidencia, pues Brievik aún mantiene sus opiniones extremistas, por lo que “es capaz de cometer nuevos atentados terroristas”.
Por ello, no podrá usar este argumento para obtener la reducción de su condena de 21 años de encarcelamiento -la más larga que ha dictado el sistema de justicia de ese país- o modificar sus medidas carcelarias.
Esta es la segunda vez que el extremista promueve una queja por el aislamiento extremo de su reclusión, toda vez que solo tiene derecho a contacto con el personal penitenciario y su condena puede ampliarse si, al termino de esta, se le sigue considerando un riesgo para la sociedad.
Doc