Morelia, Michoacán (MiMorelia.com).- En la 24 Muestra Estatal de Teatro, con la función "Latente" de la agrupación Akiazotamos, tres bailarinas describen la vida de las moscas y de las luciérnagas, contrastes de la naturaleza.
En un primer momento se escucha el diálogo de las moscas: "Nuestro cuerpo es tan sensible que podemos saborearlo todo".
Son las danzantes que dedican su performance a volar, succionar, convencer al auditorio de un fugaz e intermitente aleteo, que mueve las fibras más fuertes.
En un vaivén de posturas esforzadas pero que se aprecian naturales, las bailarinas imprimen técnica y gozo a una interpretación de insectos que deslizan su existencia infinitesimal pero intensa, abrupta e invasiva en la superficie de todo lo que tocan.
Se han vuelto incesantes, consistentes, persistentes y confiadas.
Transmiten el entusiasmo que atrapa las miradas ante su efímera y no siempre bien aceptada vida.
La catarsis pasa y de la vida entre desechos, ahora las bailarinas pasan a interpretar luciérnagas que brillan en la oscuridad, alejadas de la atracción fatal, permanecen livianas en el entorno natural.
Se mueven aleteando, místicas y proclives a la oscuridad, su máxima morada que inerte las observa, que detalla lo otrora indefinido.
Iluminan, confirman su luz que amplifica su micro espacio y microclima, que hace de su atractivo un instante desapercibido a la humanidad pero intensamente interesante para el entorno de este insecto, creado fantasiosamente para el deleite y la sorpresa.
Se convierten en fábulas, en sueños, en un arte visual danzante, constante, añorable e inspirador.
Viven y se desviven en un intento por llegar más allá de su pradera.
En la espuma sideral, buscan, se reinventan se gozan como seres celestiales en busca de alcanzar la cima de su bóveda y ahí, entregar el alma que soltó ese cuerpo inerte.
Hasta renacer en un ciclo sin fin.
Es esta la tercer obra que se presenta en el Teatro Ocampo, en donde la vida sigue latente.
mrh
