Morelia, Michoacán (MiMorelia.com).- Tras siete años del feminicidio de la joven María José Medina Flores, conocida en vida como Marijó, este jueves el juez de oralidad Cristóbal Luviano, declaró fallo condenatorio en contra de Francisco Abando Arreola y Cristian José Ramos Mena, y con ello su culpabilidad en el hecho ocurrido la madrugada del 17 de febrero del 2017.
Al darle lectura tanto a los testimonios de los testigos que desfilaron durante la audiencia oral, así como a las pruebas periciales presentadas por los elementos del ministerio público de la Fiscalía General de Justicia de Michoacán, el juez consideró la existencia de los elementos suficientes para corroborar la participación de Francisco y Cristian en el feminicidio de la joven de 19 años, originaria de Mexicali.
En este sentido relató lo narrado por el ateste principal, Pablo Enrique, quien estuvo presente durante la noche en la que Marijó fue asesinada, además de dar constancia de los testigos adicionales y los hechos secundarios, todo ello que formó parte de la tesis del tocado para declarar el fallo condenatorio.
Cristóbal Luviano confirmó la intencionalidad de tres de los cinco hombres involucrados la noche del 17 de febrero, pues además de Francisco Abando y Cristian Ramos, participó como sujeto activo Alexis Padilla, actualmente prófugo y con ficha de búsqueda.
También reconoció en el fallo la privación de la vida por razones de género, pues antes de morir, Marijó recibió tratos crueles, denigrantes y violencia sexual. Una vez fallecida a manos de Alexis por un disparo en la cabeza, su cuerpo fue arrojado semidesnudo a un barranco en un basurero en la tenencia de Atécuaro.
"Se constante que los sujetos activos actuaron de forma dolosa constituyendo los actos a sabiendas de que se trataba de un delito. Actuaron de manera consiente y voluntaria", mencionó el juez.
Argumentos de la defensa sin peso
El juez Luviano también hizo referencia a los argumentos de la defensa de los feminicidas y con los cuales buscaban desacreditar al Ministerio Público y con ello a absolución de Francisco y Cristian: el primero referente a la supuesta inexistencia del vehículo en el que se trasladaron los cinco hombres y Marijó, sobre ello dijo, el argumento quedó desacreditado gracias a las videograbaciones expuestas en el juicio; la segunda sobre las contradicciones en el color del auto, pese a que reconoció que los testigo no coincidieron en torno a ese elemento, mencionó, no tuvo mayor relevancia.
El tercer argumento de la defensa fue poner en duda el testimonio de Pablo Enrique, al declarar varios años después del feminicidio de Marijó. Sobre ello, Luviano recordó que el ateste no se contradijo en ninguna de sus declaraciones, además de que al ser un hecho impactante y traumático, quedó en la memoria del joven por ello su narración fue clara y precisa.
Con la declaratoria de culpabilidad de Francisco Abando y Cristian Ramos, el togado programó la individualización de la sentencia para ambos feminicidas el próximo 18 de julio a las 13:30 horas.
mrh