
Morelia, Michoacán (MiMorelia.com).- Diez años fuera, deportado de los Estados Unidos, Chuy regresa a su pueblo costero en Sinaloa. Lo que espera como un reencuentro familiar pronto se convierte en una encrucijada emocional: su primer amor, Chano, es ahora un sicario temido en el lugar, y los fantasmas del pasado emergen entre calles marcadas por la violencia y el narcotráfico. Esa es la premisa de "Adiós, amor", la ópera prima de Indra Villaseñor Amador, que hoy fue proyectada en función de prensa en el Teatro Melchor Ocampo durante el Festival Internacional de Cine de Morelia (FICM), seguida por una conferencia de prensa en el mismo recinto.
La película, que compite en la sección de Largometraje Mexicano del festival, es una historia que entrelaza el regreso de Chuy a su lugar de origen con el resurgimiento de un romance prohibido, todo ello en una comunidad donde el narco y la normalización de la violencia definen lo cotidiano.
Durante la conferencia, se destacó que "Adiós, amor" se filmó en Angostura, Sinaloa, con locaciones costeras y rurales que aportan realismo al relato. Villaseñor Amador trabajó con talento sinaloense para reforzar la autenticidad de la representación local.
La directora mencionó que la historia mutó durante el proceso, ya que originalmente el guion tenía otros enfoques, pero evolucionó ligeramente hacia la tensión entre deseo y peligro, todo bajo el lente crítico de una sociedad marcada por el machismo y la homofobia. "Adiós, amor", no muestra explícitamente la violencia, pero la hace presente mediante el silencio y las decisiones imposibles que sus personajes deben enfrentar.
En cuanto al elenco, lideran el reparto Ernesto Rocha como Chuy, Nick Angiuly como Chano, su viejo amor convertido en figura de poder armado y Margarita Higuera como Adriana, nuevo interés romántico y figura de contraste frente a ese pasado latente.
Técnicamente, la película tiene una duración de 107 minutos, mostrando un estilo visual contemporáneo que busca enfatizar atmósferas y escenarios sobre el ruido de las armas y las circunstancias de los personajes.
La historia de Chuy y Chano cuestiona si en medio del peligro puede florecer un amor, o si es posible sobrevivir al precio que implica amar cuando todo conspira contra ti, siendo así, una de las contadas cintas de temática LGBT que participan en esta edición del Festival Internacional de Cine de Morelia.
BCT