
Cherán, Michoacán (MiMorelia.com).- El municipio de Cherán, en Michoacán tiene el captador de agua de lluvia más grande de Latinoamérica ubicado en el cerro de Kukundicata y su construcción inicio en 2015 y fue echado a andar en 2016. Para formar la olla no se requirió de excavaciones ni deforestación, ya que el cerro contaba con un cráter natural que fue cubierto con una membrana plástica que evita que el agua se filtre al suelo.
La creación del captador benefició a más de 16 mil habitantes, ya que la recolección permite una reserva de agua de cuatro meses. Con el agua filtrada se abastecen edificios públicos, escuelas y casas.
También existe una planta purificadora para la venta de garrafones de agua, cuyo costo es de 13 pesos, 97 por ciento menor a los del mercado, que cuestan cerca de 40 pesos.
“De la captación pluvial se baja el agua a la purificadora comunal, ahí lleva su adecuado proceso y eso mismo se distribuye a un costo muy accesible, en comparación del agua de otras marcas de afuera”, explicó Yunuen Torres, exintegrante del Consejo de Jóvenes.
Los habitantes de Cherán jamás se imaginaron que el captador de agua se convertiría en el más grande de América Latina. La olla tiene una capacidad de 20 millones de litros de agua en dos mil metros cuadrados.
SJS