

Angangueo, Michoacán (MiMorelia.com).- A los 20 años, Juan Valdés Martínez inició en el cuidado del bosque de los Santuarios de la Reserva de la Biósfera de la Mariposa Monarca, Sierra Chincua es su hogar desde pequeño y proteger el bosque para que esta especie persista y tenga un lugar donde llegar, es su objetivo.
Acompañado de su hijo Cristian, de 12 años de edad, Juan aprovecha la temporada para no solo llevar a los visitantes a recorrer la sierra y lleguen al núcleo donde están las colonias de la mariposa monarca, sino darles una experiencia que no olvidarán jamás que inicia a caballo y que les permite conocer los miradores del lugar.
Respetar el reglamento, no tirar basura, guardar silencio, no cortar la flora ni llevarse la fauna forman parte de indicaciones que todo turista debe acatar para visitar uno de los lugares que es considerado Patrimonio Cultural de la Humanidad por parte de la UNESCO.
Y es que Juan comentó que uno de sus trabajos todo el año es reforestar, prevenir y evitar incendios forestales, no dejar que los talamontes estén en la zona, pero principalmente, conservar el bosque que alberga a "las novias del sol" y que durante noviembre a marzo trae alegría y un espectáculo maravilloso para admirar.
Aseguró que tener un santuario cuidado y bien conservado, permite que poco a poco incremente el turismo en la zona, donde no solo podrán subir Sierra Chincua, sino también conocer y degustar la gastronomía de la zona, además de la compra de productos locales y artesanías que las y los ejidatarios realizan.
En México son cinco los santuarios que están abiertos esta temporada que dio inicio el pasado 22 de noviembre y concluye el último día de marzo del 2026; el Estado de México tiene dos espacios naturales, mientras que Michoacán son tres ubicados en Sierra Chincua, El Rosario y Senguio. La expectativa para la temporada es una afluencia de hasta 800 mil visitantes y más de mil millones de pesos en derrama económica.
A unos escasos kilómetros del Pueblo Mágico de Angangueo, el santuario de Sierra Chincua está en el corazón de la Reserva de la Biósfera de la Mariposa Monarca; de 45 minutos a una hora es el recorrido ya sea a caballo o a pie, una vez en los bosques de oyamel el guía mostrará las colonias que forman las mariposas. El descenso es el mismo tiempo; los guías indican que es un recorrido total de dos horas, incluyendo el tiempo de estadía para admirar el vuelo de la mariposa monarca.
Estacionamiento, guías, caballos, alimentos y bebidas, venta de artesanías y productos locales... son parte de los servicios que se tienen en este espacio considerado Patrimonio de la Humanidad por parte de la UNESCO; la conservación y protección de los bosques es fundamental para que las mariposas monarcas tengan un hogar donde hibernar y aparearse antes de su regreso a Canadá y Estados Unidos.
BCT