
Morelia, Michoacán (MiMorelia.com).- Zirahuén, una de las zonas más emblemáticas de Michoacán, enfrenta una creciente crisis ambiental. Según denuncias, más de 150 ollas de almacenamiento ilegal de agua están siendo utilizadas por productores de aguacate para extraer recursos hídricos del lago, una práctica que ha estado ocurriendo de forma continua desde 2015. Esta sustracción ilegal afecta tanto al equilibrio ecológico de la región como al acceso al agua para las comunidades cercanas.
Irán Paz Mendoza, comisionado de la comunidad indígena de Zirahuén, denunció que los productores de aguacate bombean agua del lago para llenar estas ollas, que luego son usadas para el riego de sus huertas. Aunque la actividad fue reportada a las autoridades en varias ocasiones, la falta de seguimiento y de medidas contundentes ha permitido que la problemática persista y crezca.
Además de la extracción ilegal de agua, Paz Mendoza subrayó los efectos que la contaminación está teniendo en el lago. El agua del lago está siendo afectada por la presencia de microcistinas, una toxina derivada de los desechos industriales y agrícolas que llegan al lago a través del río Silencio, uno de los principales afluentes de la cuenca. Estos contaminantes son responsables de la creciente degradación del agua, afectando no solo la calidad de vida de los habitantes de la zona, sino también la biodiversidad del lago, aseguró.
La situación de los recursos hídricos en Zirahuén es alarmante, concluyó señalando Paz Mendoza, por lo que la comunidad sigue esperando que las autoridades federales y estatales, como Conagua, COFOM, Semarnat y Conafor, tomen cartas en el asunto para frenar la sustracción ilegal y atender la crisis ambiental que amenaza a este paraje natural.
AML