Morelia, Michoacán (MiMorelia.com).- Con la firma de Convenio de coordinación, entre el gobernador de Michoacán, Alfredo Ramírez Bedolla y el titular de la Fiscalía General del Estado, Adrián López Solís, se entrega y pone en operación el Centro de Resguardo Forense, en Morelia
En el evento, el mandatario estatal, Alfredo Ramírez Bedolla recalcó que este Centro de Resguardo Forense solamente es la continuación de la justicia, porque no debe haber “hipocresía” de las autoridades para poder enfrentar de la manera correcta una problemática, como es este caso de las desapariciones.
El gobernador adelantó que este Centro de Resguardo contará con un laboratorio especializado de identificación, posiblemente a partir del próximo año, en el que se involucra también personal de la Fiscalía General del Estado para poder corroborar que se encontró a la persona desaparecida y que falleció por diferentes motivos, pero principalmente a causa de la violencia, para que así las familias puedan encontrar paz.
Al respecto, el titular de la Comisión de Búsqueda de Personas en Michoacán, José Alfredo Tapia Navarrete, señaló que luego de más de cuatro años de intensa labor, del reclamo de colectivos, víctimas indirectas y recomendación organismos, por tener un espacio digno para aquellas personas que se les cataloga como desaparecidos, es que que se hace la entrega simbólica de las instalaciones a la Fiscalía General del Estado.
Recalcó que se invirtieron más de 40 millones de pesos para abonar a dar un mejor servicio a la ciudadanía, pues en este Centro de Resguardo Forense se contará con mil 1232 espacios, de los cuales 992 son gavetas para cuerpos y 240 nichos para osamentas, en un espacio de 2101 metros cuadrados.
Al hacer uso de la palabra, el titular de la FGE, Adrián López Solís, manifestó que aunque se contará con este Centro de Resguardo Forense, para el debido tratamiento de los cuerpos humanos, con el respeto debido, no deja de ser una cuestión sensible y que no resuelve la tarea, porque a la par se debe continuar con las investigaciones para dar con los responsables de la desaparición, del asesinato y ubicar a los familiares.
Expresó que para las víctimas indirectas es un proceso doloroso, porque además no es un problema que se termina de un día para otro, al registrarse más personas desaparecidas y otras localizadas pero que no se pueden identificar, motivo por el cual, subrayó, no es no es un problema que se debe ocultar.
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