Morelia, Michoacán (Mimorelia.com).- Tras concluir los cómputos distritales y entregar las constancias de mayoría a diputados y senadores electos, el Instituto Nacional Electoral (INE) ya se prepara para los comicios del 2027 dice el vocal ejecutivo de la Junta Local Electoral en Michoacán, David Alejandro Delgado Arroyo, quien dice estar “satisfecho” por el trabajo realizado durante el proceso electoral.
Tan satisfecho que considera que, gracias al INE, “institución que representa el ancla de estabilidad política en el país”, se tiene la certeza de que las elecciones se realizaron con transparencia y profesionalismo: “sin el INE no tendríamos esta paz social que se tiene”.
Destaca que el modelo laboral del INE les ha permitido mantenerse como una de las instituciones más confiables del país, debido a que sus empleos no dependen de gobiernos ni partidos políticos. El profesionalismo y compromiso con la institución tiene su base en el Servicio Profesional Electoral Nacional que establece los mecanismos de selección, ingreso, promoción, rotación, permanencia, etc., que asegura su desempeño profesional y sobre todo su independencia.
Reconoce que el proceso electoral presentó algunos retos, relacionados principalmente con los problemas de inseguridad que se registraron en el estado y la negativa de algunos autogobiernos en comunidades indígenas para permitirles instalar casillas.
Y precisamente sobre los avances o novedades que se registraron durante el proceso electoral, Delgado Arroyo destaca el voto anticipado de personas con alguna discapacidad motora, el voto presencial de los mexicanos en el extranjero -que se suma al voto postal y electrónico-, el sufragio para quienes se encentran en prisión preventiva y la extensión de la vigencia de la credencial para votar.
Al ser cuestionado sobre los temas que debería contener una reforma electoral, el funcionario se pronuncia porque ante todo sea una propuesta consensuada entre todas las fuerzas políticas y aprobada al menos por mayoría calificada o de preferencia por el 90 por ciento de los legisladores para brindar la certeza, tanto a los participantes como a la ciudadanía, de que las reglas cuentan con el aval y la participación de todos.
Y lo explicó en de esta forma:
“Creo que debería agregar que sería algo así como el home run de las reformas electorales: lo primero, establecer que toda reforma electoral debe tener una mayoría calificada y, es más, esa mayoría calificada yo la elevaría hasta un 90 por ciento ¿por qué? Porque ninguna reforma electoral debe de estar establecida o impuesta por una parte y debe de estar consensuada con todas las partes que van al juego político, que es el juego por el poder; entonces las reglas del juego deben ser aceptadas por todos los contendientes, creo que esto es básico, es decir, no debe de haber reformas electorales impuestas, debe haber reformas electorales consensuadas.
Segundo elemento que debería tener una reforma electoral: una reforma electoral debe ser una ventana que se abra solamente una vez cada seis años, en el año posterior a la elección presidencial con el propósito de que haya suficiente tiempo para su implementación, prueba en una elección intermedia y que no haya dados cargados hacia una elección presidencial; y el último elemento que debería tener una elección presidencial es que sea una reforma electoral informada, con documentos, con datos con hechos que aporten las autoridades electorales para que no sea solo una discusión de cómo vio solo una parte, un partido político, sino qué fue lo que vio la autoridad electoral”.
Finalmente, al referirse al nivel de abstencionismo o participación electoral registrado en Michoacán, opina que deja sentimientos encontrados porque, aunque se registró la participación más alta en términos cuantitativos, al rebasar más de dos millones de votos, en términos porcentuales se ubicó en la cuarta posición, después de los comicios de 1994, 2000 y 2018. Los factores que pudieron influir, dice, pueden ser: la inseguridad en algunas regiones, la polarización política y la negativa de algunas comunidades de ubicar casillas electorales.
SHA