Morelia, Michoacán (MiMorelia.com).- Las discapacidades no visibles representan un reto para las instituciones, aseguró la coordinadora del Centro de Rehabilitación y Educación Especial (CREE) de Michoacán, Astrid Margarita Salazar Cervantes, quien señaló que la discapacidad motriz sigue siendo la de mayor incidencia en los servicios de atención que ofrecen en el centro.
En ese sentido, expresó que aún hay una especie de atraso en la detección y diagnóstico de algunas enfermedades, condiciones o síndromes que generan una discapacidad y que no son visibles a simple vista.
Salazar Cervantes consideró que ha incrementado la cultura de la discapacidad, sin embargo, aún sigue siendo más fácil que las familias busquen atención para una persona con alguna discapacidad física que por alguna discapacidad no visible y, a la vez, explicó que se han incrementado las atenciones del área de psicología clínica y educativa.
El término de discapacidades no visibles se refiere a aquellas dificultades que impiden que una persona se desarrolle o se desenvuelva en su día a día de manera normal o que le causen problemas en cualquier ámbito de su vida, pero que son prácticamente imperceptibles.
Se trata por ejemplo de la discapacidad auditiva, de algunas lesiones cerebrales, de la discapacidad psicosocial, del autismo, de algunos trastornos de salud mental o de la fatiga y el dolor crónico provocado por enfermedades como la hipertensión pulmonar o la fibrosis quística, entre otros.
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