El epicentro se situó a 62 kilómetros al suroeste de dicho municipio del estado de Guerrero, con una profundidad de 53.7 kilómetros; sin embargo, no fue lo suficientemente fuerte como para encender las alarmas, pese a lo cual en la capital del país continúa la expectación.
Posiblemente, se trata de una réplica del terremoto registrado la tarde de este sábado, el cual causó nerviosismo en la Ciudad de México, dadas las experiencias anteriores con dichos fenómenos.
Por ello, el Centro Nacional de Prevención de Desastres (Cenapred) pide a la ciudadanía que aun cuando el movimiento telúrico sea leve, revise su hogar en caso de posible deterioro en las estructuras, además de usar el teléfono sólo en casos de emergencia, sin prender cerillos ni velas hasta que se esté seguro de que no haya fugas de gas ni réplicas.
oag
