
Morelia, Michoacán (MiMorelia.com).- El hallazgo de restos humanos calcinados y casi 500 objetos personales en el Rancho Izaguirre, ubicado en Teuchitlán, Jalisco, ha conmocionado a colectivos de búsqueda y organismos internacionales. La Oficina de Derechos Humanos de la ONU calificó el descubrimiento como "un recordatorio profundamente perturbador" de las desapariciones forzadas en México.
El hallazgo incluye mochilas, ropa, zapatos y cartas pertenecientes a personas desaparecidas, presuntamente retenidas en contra de su voluntad en este sitio vinculado al crimen organizado.
De acuerdo a la ONU-DH, el rancho era utilizado para reclutar a jóvenes con falsas ofertas de empleo. Una vez dentro, eran sometidos a brutales entrenamientos, y aquellos que no cumplieran con los requisitos del grupo criminal eran asesinados.
La vocera de la ONU-DH, Liz Throssell, llamó a las autoridades mexicanas a garantizar investigaciones exhaustivas e imparciales, además de fortalecer las medidas de protección para las familias en la búsqueda de sus seres queridos.
Uno de los aspectos más preocupantes es que este rancho ya había sido allanado en septiembre de 2024 por la Guardia Nacional y la Fiscalía del Estado de Jalisco, pero en esa ocasión no se encontraron pruebas contundentes. Ahora, con este nuevo hallazgo, surgen dudas sobre la eficacia de las investigaciones previas y si existió omisión por parte de las autoridades.
RPO