

Morelia, Michoacán (MiMorelia.com).- Luces, abrazos, villancicos… y una billetera al límite. La Navidad, una de las épocas más esperadas del año, también se ha convertido en una fuente importante de estrés financiero para más de la mitad de los mexicanos, quienes llegan a diciembre con gastos acumulados y la clásica promesa de que “en enero ven cómo le hacen”.
De acuerdo con un reciente estudio de la firma de investigación de mercados Ipsos, el 53% de los mexicanos presenta un alto grado de estrés derivado de los gastos navideños, relacionados con la compra de alimentos para las cenas, regalos, reuniones familiares y hasta ropa nueva para Navidad y Año Nuevo.
El impacto no es igual para todos. El análisis revela que quienes más resienten la presión económica son los adultos de entre 51 y 70 años, con una incidencia del 58%, seguidos muy de cerca por las personas de 36 a 50 años, con un 50%. Se trata de generaciones que suelen cargar con múltiples responsabilidades: hijos, padres, compromisos sociales y la presión constante de “no quedar mal” en estas fechas.
La paradoja, señala el estudio, es clara: a mayor número de responsabilidades, menor margen de error financiero, en una temporada que exige gastar como si el dinero fuera ilimitado, cuando en realidad no lo es.
Ipsos también advierte que el 54% de los consumidores mexicanos incrementó su presupuesto para Navidad este año, pese al aumento generalizado de precios. El objetivo: celebrar “como se debe” y no quedarse con las ganas de comer, beber y convivir.
En promedio, las familias mexicanas destinarán entre 17 mil y 19 mil pesos para estas fechas, monto que incluye platillos tradicionales como pierna, romeritos y bacalao; bebidas alcohólicas y no alcohólicas; regalos y adornos para las celebraciones del 24 y 31 de diciembre, de acuerdo con estimaciones de la Condusef y la Anpec.
Fernando Álvarez Kuri, director de Ipsos en México, destacó que, contrario a lo que podría pensarse, los mexicanos han optado más por la planeación que por el endeudamiento. Detalló que el 53% de los consumidores financia sus gastos navideños con el aguinaldo, mientras que solo el 22% recurre a las tarjetas de crédito.
Este comportamiento, explicó, refleja una cultura financiera más prudente y la capacidad de muchas familias para ajustar sus finanzas ante los picos de consumo de fin de año, aunque el estrés siga siendo un factor presente en la temporada.
mrh