Morelia, Michoacán (MiMorelia.com).- Brasil atraviesa una crisis climática sin precedentes debido a una ola de calor que ha elevado las temperaturas a niveles récord.
En Río de Janeiro, los termómetros marcaron 44 °C, la temperatura más alta registrada en la ciudad desde 2014, mientras que la sensación térmica alcanzó impresionantes 70 °C en algunas zonas, según diversos cálculos meteorológicos.
El intenso calor ha sido agravado por una preocupante falta de lluvias en varias regiones del país. Normalmente, febrero se caracteriza por tormentas vespertinas que ayudan a refrescar el ambiente, pero en esta ocasión la sequía ha contribuido a que las temperaturas se mantengan elevadas incluso por las noches.
En al menos 44 ciudades brasileñas, los termómetros no bajaron de 30 °C durante la madrugada del 16 de febrero, impidiendo que la población pueda descansar adecuadamente.
El Instituto Nacional de Meteorología (Inmet) ha emitido alertas para siete estados debido a las condiciones climáticas extremas. En respuesta, algunas autoridades han optado por suspender clases y han exhortado a la población a evitar la exposición prolongada al sol, mantenerse hidratada y buscar refugio en espacios con ventilación adecuada.
Los expertos advierten que el fenómeno persistirá en los próximos días, con temperaturas promedio de 36 °C y sensaciones térmicas que seguirán por encima de los 50 °C.
Entre las causas de esta situación se encuentra el efecto de la "isla de calor urbana" en ciudades como Río de Janeiro, donde la acumulación de concreto y asfalto, junto con la alta densidad poblacional, intensifican el calor y dificultan su disipación.
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