Morelia, Michoacán (MiMorelia.com).- Las pruebas químicas aplicadas a dos playeras que presuntamente pertenecían a Diego Urik "N", dieron positivo a fluido biológico comparativo a sangre, reveló el perito químico de iniciales C. E. adscrito a la Fiscalía General de Justicia de Michoacán.
Durante el desarrollo del juicio oral en torno al feminicidio de Jessica González Villaseñor, el perito describió las acciones que realizó el 22 de septiembre del 2020, un día después de que la joven maestra fuera reportada como desaparecida.
El experto mencionó haber llegado a la vivienda donde residía el presunto feminicida, con el fin de realizar una búsqueda biológica mediante pruebas macroscópicas en los dos niveles de la residencia. En el primer nivel se revisaron los textiles de los muebles y paredes con resultado negativo.
En el segundo nivel, el padrastro de Diego indicó la pertenencia de cada dormitorio; en el principal y el de una niña, las muestras también salieron negativas, mientras que en el cuarto del imputado, se revisaron las prendas de un sesto con ropa sucia.
Fue una playera blanca en dónde se encontró una mancha café en la parte baja, y otra negra -ambas húmedas- las que llamaron la atención del investigador, quien aplicó peróxido y se descubrió material inherente a fluido comparativo a sangre. A las dos prendas se les cortó 0.5 centímetros para preservar la muestra. Ya en el laboratorio las técnicas aplicadas pudieron determinar sangre humana en las dos playeras.
El perito especificó que sería el área de genética la responsable de hacer coincidir la sangre con la persona a quien pertenecía, argumento que la defensa de Diego Urik "N", intentó desestimar en varias ocasiones, sin embargo, el propio testigo mantuvo su declaración haciendo evidente que los abogados del imputado intentaban confundir a las áreas correspondientes.
C. E., también hizo pública su opinión en torno al método de búsqueda en el empleo de reactivo para dar con "sangre lavada" en el vehículo Volkswagen Polo que Urik conducía.
La diligencias se realizaron el 23 de septiembre del 2020 y luego de aplicar el reactivo correspondiente, agua destilada y tabletas, las muestras nuevamente dieron positivo a sangre pese al intento de remover la mancha, ya que el químico reaccionó a grupos de hierro.
La defensa de Diego se vio rebasada por el testigo pues gracias a sus conocimientos en la materia, consiguió refutar todas las preguntas de los abogados.
Entre los argumentos que los defensores intentaron fue sugerir que las pruebas a sangre podrían resultar en un falso positivos, sin embargo, el químico atajó el argumento.
Si bien, durante esta audiencia no se dio a conocer el origen de la sangre, si se pudo dar cuenta de su existencia en dos playeras y el vehículo del presunto feminicida, esta última con intento de ser eliminada sin éxito.
EA
