Morelia, Michoacán (MiMorelia.com).- Durante el primer bimestre del año los precios de los combustibles registraron un incremento superior a un peso en el estado de Michoacán, de acuerdo con datos de la plataforma PETROIntelligence.
En el caso de la gasolina magna o regular, que es la más utilizada por los conductores, el primero de enero el litro registraba un precio promedio de 22.35 pesos, el costo promedio para el 28 de febrero era de 23.96, es decir, un peso con 61 centavos más cara.
En el caso de la gasolina premium o roja, el primer día del año tenía un costo promedio de 24.29 pesos, mientras que para el 28 de febrero era de 24.97 pesos, es decir, un incremento de 68 centavos.
En cuanto al diésel, usado por la mayoría de vehículos de carga para el movimiento de mercancías, el aumento fue de un peso con 39 centavos, al pasar de 24.13 pesos por litro en promedio durante el 1 de enero a 25.52 pesos el 28 de febrero.
Los precios mínimos registrados el penúltimo día del mes de febrero en la entidad fueron de 20 pesos el litro de la magna, de 17.31 de la premium y de 20 pesos el litro de diésel. Los precios máximos alcanzados fueron de 25.43, 25.5 y 27.04 pesos, respectivamente.
Para realizar estas mediciones PETROIntelligence revisa el costo diario de entre 350 y 500 estaciones de servicio.
El analista financiero Christian Martínez y el empresario gasolinero Mauricio Prieto señalaron que dos de los factores que han provocado el aumento de los combustibles es la reducción del monto del estímulo sobre el Impuesto Especial sobre Producción y Servicios (IEPS) de los combustibles, así como un cierre comercial en la frontera norte del país.
"Hay un tema que a algunos empresarios gasolineros les está pegando duro, que es la reducción del monto del estímulo sobre IEPS de los combustibles […] qué es lo que sucedió, tiene dos semanas cerrada la frontera y la mayor parte de combustible que se está vendiendo en el país lo está suministrando Pemex y por eso lo está dando mucho más caro", dijo Mauricio Prieto.
Al respecto, Christian Martínez añadió que "en nuestro país el precio de los combustibles no es de libre mercado como muchos piensan, sino que el precio está regulado por el gobierno mediante la concesión del cobro del IEPS aplicado a los combustibles, entonces el aumento en el precio se debe principalmente a eso, a que el gobierno ha estado disminuyendo ese subsidio con el propósito de generar una mayor recaudación".
Ambos coincidieron en que este aumento impacta directamente en el bolsillo de las familias y de los transportistas, pero también podría causar un efecto inflacionario indirecto.
"El aumento de los combustibles genera un aumento en el costo del transporte de mercancías que las comercializadoras trasladarán al precio final", dijo el analista financiero, quien agregó que seguramente en las próximas semanas el transporte público, de manera natural, buscará aumentar el costo de los pasajes.
"No creo que aguante mucho cerrada la frontera -que está cerrada para todo el comercio en general- hay un desorden y según los proveedores esta semana se podría abrir", auguró el empresario Mauricio Prieto, quien dijo que una vez restablecido el flujo de combustibles podría reducir el costo de los mismos.
"En Michoacán se vendió entre un 8 y 10% más combustible en el primer bimestre de este año con respecto al mismo periodo del año pasado, y el costo ha aumentado entre un 15 y 18%. Sí está pegando en el bolsillo a los ciudadanos, pero esperamos que se abra la frontera en los próximos días; el precio de los combustibles tiene que bajar", dijo al respecto.
Finalmente, tanto Christian Martínez como Mauricio Prieto coincidieron en que el aumento también está relacionado con el proceso electoral que se vive en México.
"Necesitan subir la recaudación y esta es una de las medidas que más rápido tiene impacto, mover los impuestos al combustible”; “La reducción del IEPS es meramente electoral", dijeron respectivamente.
Mauricio Prieto reconoció que, pese a que el monto de subsidio del IEPS es menor, siempre se mantiene este estímulo, ya que, de no ser así, los costos serían de 4 o 5 pesos más por litro. "Si el gobierno le quita el apoyo al IEPS, el combustible para nosotros (proveedores) costaría 27 pesos", dijo.
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