
Morelia, Michoacán (MiMorelia.com).- Más allá de la controversia por la supuesta baja venta de boletos, Kendrick Lamar ofreció un concierto memorable en el Estadio GNP Seguros de la Ciudad de México. En un espectáculo cargado de introspección, poder lírico y homenajes a las raíces del soul y el R&B, el rapero demostró por qué es uno de los artistas más influyentes de su generación.
Desde días antes, en redes sociales circulaban rumores sobre la “baja demanda” de boletos, lo que dio pie a una narrativa de fracaso inminente. Algunos llegaron a especular con la cancelación del evento. Irónicamente, fue el concierto de Ghost en el Palacio de los Deportes —programado el mismo día— el que sí fue cancelado.
Kendrick, sin embargo, apareció puntual y contundente. A las 9:30 de la noche, las pantallas del estadio mostraron su silueta mientras sonaba “wacced out murals”. Desde ese momento, quedó claro que lo que importaba no era la asistencia, sino la experiencia.
Tras abrir con “Squabble Up” y “N95”, el público se entregó por completo. Los rumores de vacío quedaron atrás cuando miles corearon su nombre y encendieron el ambiente con luces y aplausos. Kendrick respondió con un poderoso mash-up de “King Kunta”, “ELEMENT.” y “tv off”.
El show no fue solo una sucesión de canciones; fue un viaje conceptual. Visuales introspectivos, escenas teatrales y una narrativa personal le dieron forma a un espectáculo profundo.
Uno de los momentos más inesperados fue cuando “m.A.A.d city” apareció, no en su versión habitual, sino con un arreglo instrumental de “Sweet Love” de Anita Baker, ícono del R&B. Más tarde, con “luther”, Kendrick también rindió tributo a Luther Vandross, otro gigante del soul.
Entre introspecciones y temas cargados de crítica social, también hubo espacio para la polémica. “Euphoria”, uno de los famosos ‘diss tracks’ dirigidos a Drake, prendió al público, aunque el ambiente se mantuvo en comunión.
El final llegó con fuerza: “DNA.”, “Poetic Justice”, y el encore con “Not Like Us”, que generó uno de los momentos más catárticos de la noche. Lamar agradeció visiblemente conmovido.
RPO