Morelia, Michoacán (MiMorelia.com).- Los mercados financieros mexicanos experimentaron una jornada de volatilidad este lunes, luego de que los resultados preliminares de las elecciones arrojaran una mayoría calificada en la Cámara de Diputados para el partido oficialista y sus aliados.
Tal hecho, es decir, la alineación de la fuerza partidaria en las cámaras alta y baja, así como en la presidencia de la República con la reciente virtual victoria de Claudia Sheinbaum, generó una reacción negativa en los activos mexicanos, con una caída significativa del peso mexicano y del Índice de Precios y Cotizaciones de la Bolsa Mexicana de Valores (BMV).
El peso mexicano inició la jornada cotizando a 16,97 pesos por dólar y cerró en 17,70 pesos por dólar en los mercados mexicanos, lo que representó una caída del 4,3%. Esta depreciación colocó al peso como la moneda más afectada entre sus pares a nivel mundial. Por su parte, el Índice de Precios y Cotizaciones de la BMV cayó un 6% al cierre de la jornada, reflejando la preocupación de los inversionistas ante el nuevo panorama político en el país.
En la Cámara de Diputados, los partidos afines al bloque oficialista lograron entre 346 y 380 curules, según informó el Instituto Nacional Electoral (INE) en su conteo rápido. Este resultado les brinda la oportunidad de reformar la Constitución y aprobar 20 reformas que el presidente Andrés Manuel López Obrador dejó pendientes.
Según le sitio "El País", Luis Gonzali, estratega financiero de Franklin Templeton en Ciudad de México, señaló que los resultados electorales generaron nerviosismo en el mercado, ya que divergieron de las expectativas previas de los inversionistas. La posibilidad de una mayoría calificada en el Congreso plantea incertidumbres sobre el futuro económico del país, especialmente en temas sensibles como el sector energético y las finanzas públicas.
Las reformas propuestas por el partido oficialista incluyen medidas que podrían afectar la iniciativa privada en el sector energético, lo que ha generado preocupación entre los inversionistas. Además, se planea aumentar las pensiones para los sectores más vulnerables, lo que podría ejercer presión adicional sobre las finanzas públicas, ya comprometidas por un déficit fiscal elevado.
La agencia calificadora de riesgo crediticio Fitch expresó su preocupación por el alto déficit fiscal heredado por la nueva administración, destacando la necesidad de claridad en las políticas económicas y fiscales para garantizar la estabilidad financiera del país.
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