Morelia, Michoacán (MiMorelia.com).- En la vida de una futbolista a veces es necesario tomar decisiones que impliquen cambiar de ciudad o de país para seguir con el sueño de ser profesional; así es el caso de Lucero Lara Bañuelos, jugadora de Monarcas Morelia Femenil y que se convirtió en la primera jugadora mexicoamericana en defender la playera Rojiamarilla.
"Monarcas Femenil significa todo en mi vida, dejé todo lo que tenía en Estados Unidos para estar aquí", expresó la jugadora nacida en Sulphur Springs, Texas; durante una entrevista que concedió a MiMorelia.com sobre su experiencia de jugar en el Arizona State University, las lesiones que la marginaron de disputar mundiales y cómo fue que llegó a la capital michoacana.
https://www.instagram.com/p/B61tuWrB5WC/
-Yo nací en Estados Unidos, de padres mexicanos, originarios de Zacatecas que se fueron a vivir muy chicos a Sulphur Springs, Texas; es un pueblo muy chico, pero yo empecé a jugar desde los tres años de edad, porque acompañaba a mi papá y mi hermano a todos lados.
Desde entonces yo estaba corriendo detrás del balón, desde ahí me nació el amor al futbol; jugaba con mi hermano, éramos muy competitivos, siempre le quería ganar a él, eso me motivó.
Es una cosa muy humilde, porque yo vengo de una familia muy pobre; mis papás hicieron muchos sacrificios para nosotros, siempre tenía zapatos, pero nunca supe lo que ellos estaban sufriendo en sus finanzas, por lo que si no fuera por ellos no estaría aquí.
-Fue hasta los 13 años que comencé a jugar en un club competitivo, que viajan a otros estados estadounidenses y al estar en ese equipo llegué a estar en el equipo nacional de México y de Estados Unidos.
Jugué en EU, cuando me cortan a los 14 años de la selección de aquel país y México me convocó para estar en la sub 17, sub 20 y la mayor, pero cada que iba a jugar un Mundial, me rompía los ligamentos cruzados de la rodilla, es algo del porqué estoy aquí.
En mi universidad jugué 4 años y al terminar pensaba que el futbol no era para mí, no va a hacer nada en mi vida, dejé de jugar, pero después por cosas de la vida me cuestione: ¿por qué no intentarlo?, cuando mis amigas estaban en Europa, en las selecciones de Estados Unidos o México; entonces contacté a dos chavos, Marcelo y Carlos Padilla, que tenían conocidos en el futbol y después llegué aquí a Morelia, de donde me enamoré del equipo, los profes, de todo.
https://www.instagram.com/p/B8Z3jgkBjjH/
-Fue el primer equipo que hice pruebas, porque conozco al entrenador Leonardo Cuellar de la selección; estuve ahí unos meses, pero después las cosas no llegaron cómo queríamos. Mi meta era llegar a la Liga Femenil y jugar, por eso cuando llegué a Morelia ellos me ofrecieron este proyecto y dije que sí.
-El futbol es diferente, allá estás acostumbrada a un juego más físico, más rápido, es muy atlético, casi no ves jugadoras que sean técnicas; esa es la razón por la que decidí venir a México, no a Europa o Estados Unidos, porque aquí hay más apoyo que en la Liga Femenil Profesional y mi especialidad es la técnica; allá es más golpe, aquí es menos choque, es lo que yo quería.
Por eso escogí la Liga, porque está creciendo muchísimo, hay mucho apoyo, no le falta mucho para ser de las las mejores, a lo mejor agregar un poco a las mexicoamericanas; yo creo que pueden ser las mejores ligas en el mundo.
-Cuando llegué, literalmente no conocía a nadie en el equipo, estaba acomodando mis cosas y se me acercaron Marypaz Barbosa, Dalia Molina, Diana García, Alejandra Lúa, por ejemplo, pusieron su equipamiento frente de mí y yo pensaba: ¿me conocen?, ¿las conozco? y empezaron a hablar y a presentarse.
Desde el principio me sentí en casa, por eso me encantó Morelia; nunca sentí que no fuera parte del equipo y los entrenadores también me dieron la bienvenida. Si no fuera por eso, yo estaría muy perdida en la ciudad; Marypaz me dijo que en lugar de rentar podía quedarme en su casa mientras hacía las pruebas. Ellas me ayudaron a adaptar muy rápido y me enseñaron a andar en combis, por la ciudad.
https://www.instagram.com/p/B8HSkWSB2md/
– Mi obligación y meta es hacer lo mejor posible dentro y fuera de la cancha, yo siempre quiero ser positiva, animar a mis compañeras de hacer el mejor esfuerzo. Lo que creo que quiere el equipo de mí es seguir con la comunicación, porque, aunque no sé mucho español y a veces no sé unas palabras, en el partido no paró de hablar, lo que creo motiva a mis compañeras.
-En mi primer partido contra Atlas estaba muy nerviosa, estaba muy ansiosa, fue un shock; nunca creí tenerlo, pero en cuanto entré a la cancha fue como: hay muchísima gente, mi familia me está viendo y aunque he estado en la selección, no es lo mismo, porque en cada experiencia te preguntas: Wow, ¿estoy jugando?
Al principio me costó, pero los siguientes partidos he mejorado y me he calmado.
-Mejorar lo que hicimos la temporada pasada, entrar a Liguilla, pero no solo jugarla, sino llegar lo más lejos posible, porque cada vez hemos mejorado y jugamos mejor como equipo; es la meta que tenemos ahorita.
https://www.facebook.com/mimoreliacom/videos/1367791396743540/
Por: Josimar Lara/rmr