
Morelia, Michoacán (MiMorelia.com).- La cátsup, ese acompañante infaltable de hamburguesas, papas fritas y hot dogs, fue puesta bajo la lupa por la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco). El resultado: aunque varias marcas destacaron por su calidad, ninguna cumplió con el mínimo de 12% de sólidos de tomate que establece la norma oficial mexicana.
El estudio, publicado en la Revista del Consumidor, evaluó presentaciones de circulación nacional y reveló que las salsas cátsup más recomendadas son Heinz, Santiveri, La Costeña y Huntz, por su mayor cantidad de tomate en comparación con otras.
Profeco destacó que todas las salsas cátsup contienen azúcares añadidos, principalmente glucosa y fructosa, lo que en exceso puede derivar en problemas de salud como sobrepeso y diabetes tipo 2. Una porción pequeña de 15 gramos llega a tener hasta 4 gramos de azúcar.
Además, la institución recordó que este aderezo no sustituye el consumo de vegetales frescos y puede dar una falsa sensación de alimentación “sana”.
Revisar que el envase no esté dañado y verificar la fecha de caducidad.
Evitar su consumo en caso de gastritis o úlcera, por su grado de acidez.
Moderar su ingesta si se tiene diabetes o se sigue una dieta baja en sodio.
Conservar bajo refrigeración después de abrir el producto.
El kétchup, como se le conoce en Europa, tiene una historia curiosa. De acuerdo con National Geographic, marinos europeos conocieron la salsa en el sudeste asiático entre los siglos XVII y XVIII, y la adaptaron con ingredientes locales hasta convertirla en la versión de tomate que conquistó al mundo.
Hoy, su popularidad sigue vigente en los alimentos más comunes de la comida rápida. Sin embargo, la Profeco invita a los consumidores a elegir con cuidado y no olvidar que, aunque deliciosa, la cátsup debe disfrutarse con moderación.
RPO