Este árbol frutal es ideal para macetas grandes debido a su tamaño moderado y sus raíces que se adaptan bien al confinamiento. Proporciona sombra ligera y en primavera se llena de flores blancas, seguidas de frutos comestibles.
Conocido por su importancia en celebraciones como el Día de Muertos y Navidad en México, el tejocote es un pequeño árbol frutal que se puede cultivar en macetas. Sus flores blancas y sus frutos amarillos o rojos añaden un toque decorativo.
Este árbol, que es parte del hermoso paisaje de bosques michoacanos, también puede crecer en macetas. Tiene una corteza colorida que se pela con el tiempo y produce frutos esféricos que atraen a las aves.
Similar en apariencia a la guayaba, el guayabillo es más pequeño y perfectamente adecuado para el cultivo en macetas. Sus frutos son comestibles y atractivos para la fauna local.
Aunque técnicamente es más un arbusto que un árbol, las zarzamoras son nativas de Michoacán y pueden ser cultivadas en macetas. Requieren soporte para sus tallos trepadores y producen frutos deliciosos que se pueden comer frescos o usar en postres.