

Morelia, Michoacán (MiMorelia.com).- México volvió a conquistar los paladares del mundo. En su más reciente ranking global, TasteAtlas —la enciclopedia culinaria colaborativa en línea— colocó a la cocina mexicana en el lugar número 11 de su lista de las 100 mejores del mundo, reconociendo su riqueza, sabor y tradición.
Con base en más de 590 mil calificaciones de usuarios sobre 18,912 platillos registrados en su plataforma, TasteAtlas elaboró cinco rankings para cerrar el año. Uno de los más relevantes es el de las mejores cocinas del mundo, donde Italia, Grecia y Perú ocuparon los primeros lugares, seguidos por Japón, Turquía y España. México, con todo y sus sabores milenarios, logró posicionarse por encima de potencias como India, Estados Unidos, Argentina o Alemania.
Este reconocimiento no pasó desapercibido gracias a un platillo que ha ganado fuerza en los últimos años: la quesabirria. Esta creación que mezcla lo mejor de la birria tradicional con el concepto urbano del taco con queso, obtuvo el puesto número 9 en el ranking de los mejores platillos del mundo.
Pero el reconocimiento va más allá del antojo callejero: TasteAtlas también elogió otros platos icónicos como la cochinita pibil, las carnitas y el caldo de queso, en un intento por representar la diversidad regional que da identidad a nuestra cocina.
Además de la comida, México brilló con luz propia gracias a sus productores gourmet. Entre los más destacados se encuentran Cierto Tequila y Tequila Ocho, así como las marcas de chocolate Feliu y Cuna de Queso. También fue aplaudido el trabajo de Productos Lácteos La Providencia, que mantiene viva la tradición quesera mexicana con estándares de alta calidad.
Aunque algunos críticos podrían cuestionar por qué no estamos en el top 10, la realidad es que cada vez más cocinas del mundo reconocen en México una potencia cultural y gastronómica.
Este ranking, publicado cada diciembre, no sólo celebra el sabor, sino también la historia, los ingredientes locales y la pasión de quienes cocinan para compartir un pedazo de su tierra. En cada tortilla, en cada salsa, en cada sorbo de tequila, México se cuenta a sí mismo.
RPO