Morelia, Michoacán (MiMorelia.com).- La disminución en las actividades humanas, así como de personas en las calles ha sido uno de los factores por el que ha aumentado la presencia de animales salvajes en las ciudades. Este podría ser el caso del cocodrilo que se ha visto desde hace un par de semanas en el río que colinda con Hacienda La Huerta, fraccionamiento ubicado al surponiente de la ciudad.
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Vecinos de la zona reportaron en redes sociales que había un cocodrilo suelto en el río, sin embargo, fue hasta este lunes que personal de Protección Civil logró ubicarlo e intentó capturarlo, sin embargo, logró escapar.
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A finales del 2019, el 27 de diciembre, un cocodrilo de aproximadamente 4 metros de longitud se introdujo en una cancha de futbol que se ubica en la carretera que conduce a Playa Jardín, en el municipio de Lázaro Cárdenas. Los jugadores solicitaron el apoyo de servicio emergencias, quienes arribaron al sitio, lo capturaron y fue liberado en Barra de Santana.
Meses antes, a principios de junio del año pasado un cocodrilo de aproximadamente un metro de longitud fue visto nadando en el Lago de Zirahuén. Posteriormente se supo que quedó atrapado en un red y murió.
En 2018 las inundaciones provocadas por la depresión tropical 19-E en el municipio de Lázaro Cárdenas provocaron que al menos dos cocodrilos deambularan por las calles de la colonia Corregidora. Luego de varias horas de labores, personal de Protección Civil puedo capturarlos y regresarlos a sus hábitats.
Durante 2015 se registraron al menos tres ataques de cocodrilos en el municipio de Lázaro Cárdenas. El primero ocurrió el 19 de mayo, cuando un niño de 7 años de edad fue arrastrado por el reptil cuando jugaba con una pelota en el estero Santa Ana.
El 25 de junio un cocodrilo que estaba escondido en un baño de una vivienda de la colonia Río Balsas atacó a una mujer cuando ésta se disponía a bañarse. La fémina perdió un brazo.
A principios de agosto del mismo año, un pescador resultó con varias heridas en una pierna al ser atacado por un cocodrilo, en la laguna Mata de Carrizo.
Si bien, todo apunta a que se trata de un cocodrilo, estas son algunas formas de diferenciarlos, y será hasta que sea capturado cuando se confirme si se trata de uno u otro.
Los cocodrilos viven en agua salada debido a glándulas en sus bocas, sin embargo, muchos también pueden hacerlo en agua dulce. Por el contrario, el caimán sólo puede vivir en agua dulce, como ríos, lagos y lagunas.
Otra diferencia notoria es el tamaño, pues el cocodrilo es más grade que el caimán, el cual puede llegar a medir alrededor de 2 metros en su edad adulta. Asimismo, la forma de los hocicos es distinta. Los caimanes tienen un hocico ancho, redondo en forma de U y más pequeño que el de los cocodrilos, los cuales tienen un hocico más delgado y puntiagudo en forma de V.
Por: Redacción/R