Pensar en paralelo

Uno de los recursos de mayor valor en los seres humanos es, pensar. Ningún animal en la tierra lo hace como lo hacemos los humanos y esto es lo que nos hace diferentes y superiores a todos los animales terrestres.

Sin embargo, no todos los seres humanos tienen una misma concepción acerca del pensar. En occidente, en países como México, las personas suelen pensar con la finalidad de demostrar que tienen la razón (por su propia satisfacción).

¿Te ha pasado que en alguna reunión aportas una idea y alguien no quiere “quedarse atrás” y aporta otra similar o de plano descalifica la tuya? Y si no te ha pasado a ti, seguramente has estado en una de esas reuniones en donde uno no se quiere “dejar” del otro para aprovechar la oportunidad y lucirse frente al jefe porque tiene la idea de que así avanzará.

Uno de los problemas en el ser humano es que tiene una visión limitada de lo que el pensamiento es capaz de lograr, sumado al ego personal que nos convence de que “lo mejor es ganar la gloria de manera individual”.

¿En dónde está el punto central de lo que digo? En que cuando pensamos -en un reunión por ejemplo-, al estar pensando se viene una confusión como resultado de que queremos hacer demasiadas cosas a la vez. Al pensar, se nos vienen de un golpe emociones, información, la lógica, la esperanza y la creatividad.

Esto es como querer hacer malabares con varias pelotas a la vez.

¿Y entonces, hay solución? Sí la hay y precisamente es aplicar el pensamiento paralelo.

Les dejo un tip: En alguna reunión saquen a los participantes de su modo de hacer y pensar habitual para que piensen de manera distinta sobre el tema que se vaya a tratar y verán grandes cambios y resultados.

Constrúyete como marca y véndete con éxito utilizando estas ideas y verás que la abundancia llegará a ti.

El autor es consultor y capacitador de empresas y negocios, es maestro en Neuromarketing por la Universidad de La Rioja, España / WhatsApp 4433181742 / redes sociales @ChristiánConAcento

rmr