A finales de abril el presidente dijo que buscaría hablar con los empresarios productores de artículos de la canasta básica para “ponerse de acuerdo” respecto de que no suban más los precios y establecer algunos como máximos con el objetivo de detener la crecida de la inflación. Esto, en español, se le conoce como control de precios y se da cuando el gobierno de un país determina cual será el importe máximo al que se venderán ciertos productos. Esto es una pésima idea y demuestra únicamente que los asesores que están apoyando al gobierno federal solamente buscan una política que genere votos vendiendo beneficios falsos en el corto plazo.
Las razones por las que esto es una terrible idea son muchas, pero para no aburrirte solamente te voy a pasar las principales tres:
Origen distinto de la Inflación: Los controles de precios se dejaron de usar en los años 70´s y 80´s por una muy buena razón. Es una estrategia creada para controlar la inflación cuando esta se origina por un exceso de demanda, es decir, hay mucha liquidez en el mercado lo que genera que la gente que desea adquirir productos supere a aquellos producidos lo que provoca un aumento de precios. Es una escasez por sobre demanda y es radicalmente lo opuesto que estamos viviendo. Actualmente el origen de la inflación es un choque de oferta, es decir, el proceso productivo se detuvo por motivo de la pandemia y la guerra. Esto significa que la escasez que estamos viviendo no es por sobre demanda sino por falta de oferta y esta circunstancia generaría un efecto contrario sobre la inflación en caso de querer controlar los precios.
Proliferación del Mercado Negro y la corrupción: Si un gobierno quiere controlar los precios necesita establecer mecanismos de supervisión que son muy costosos. Adicionalmente, cuando controlas el precio de venta de un producto ante un entorno de choque de oferta como el que estamos viviendo provocaría que los fabricantes pierdan sus márgenes de utilidad ya que los insumos si seguirían subiendo de precio llevándolos a la quiebra de una manera muy rápida provocando, como efecto secundario, desempleo al no poder pagarle a sus empleados. Adicionalmente, si un artículo está limitado en su precio el cual no es rentable para el productor entonces éste terminará guardando sus productos para venderlos “por fuera” a aquellos quienes estén dispuestos a pagar más. Esto afecta de manera directa a los pobres y beneficia a los ricos. Otra consecuencia es que, cuando prohíbes el libre mercado de algo, SIEMPRE encontrará un mercado negro para desplazarse lo que requiere la participación de las autoridades generando un caldo de cultivo para la corrupción.
Aumento de la Inflación y Escasez: Cuando un productor de bienes se topa con que debe vender sus productos al mismo precio que los demás entonces ya no encuentra incentivo para mejorar la calidad eliminando la sana competencia y generando que productos chafas valgan más al eliminar los de buena calidad del mercado. Posterior a esto el productor ya no tendrá interés en siquiera producirlos generando cada vez menos productos disponibles profundizando el choque de oferta y en consecuencia la inflación.
Ya para no aventarte más rollo sólo quiero que te quedes con la idea de que una política de control de precios, en lugar de ayudar a bajar la inflación, agravaría el problema y dejaría un mercado golpeado y detenido causando que la recuperación sea más lenta y tardada. Ojalá los tomadores de decisiones económicas lean libros y teorías de este siglo para que no pongan sobre la mesa propuestas retrógradas, ineficientes y perjudiciales para nuestra ya de por sí frágil economía.
Si tienes alguna duda específica que quieras resolver o tema que quieras que platique en este espacio pregúntame en mi correo inteligenciaenfinanzas@gmail.com, a mi Twitter @RockBrokers o en www.facebook.com/rockbrokers/ y ahora también en www.facebook.com/InteligenciaSeguross/
rmr
