Un gobierno del pueblo y para el pueblo, democracia se da en los hechos, no sólo en la narrativa de la Mafia del Poder.
Vista panorámica
Algunas expresiones están tomadas del léxico de Ya-Sabes- Quien . Para muchos son sagradas. Son conocidas para otros.
En los dichos, todos o casi todos estamos por una república democrática, en los hechos nos dividimos y algunos, una parte numerosa, lo son todo el pueblo de México, llega al poder por la vía democrática y se convierte en una dictadura. Quieren un poder autoritario de una dictadura despótica, como la dictadura del proletariado de la URSS, de Cuba, o Venezuela.
Hay hechos que evidencian que en México se acabó la democracia, se acabó la división real de poderes y ahora tiene el poder una sola persona con su partido y sus funcionarios impuestos, perdón electos, y su masa sumisa, los beneficiarios de sus programas de beneficencia. A su lado vejeta una gran masa de ignorantes y de indiferentes. Han sido mantenidos sin educación, sin dignidad, con la autoestima muy baja y en postración para poderlos manejar .
México no es un pueblo que defienda sus derechos cívicos y la democracia.
Afirman los medios de comunicación: “hace México experimento kafkiano para elegir jueces”. Los mexicanos tenemos otros frentes de lucha vitales, tremendos. El Narco ha tenido permiso para crecer y volverse poderoso. Se siente un entendimiento de facto entre las autoridades y cárteles y grandes capos. Abrazos y no balazos.
Con la presión de Estados Unidos se está combatiendo este estructura de poder fáctico y criminal, una tarea que nuestro gobierno no hizo. Hay muchos capos detenidos y los grandes cárteles se sienten golpeados seriamente.
Vivimos en la violencia sangrienta, por todos lados se ha asesina, con toda facilidad, impunemente, el desamparo es trágico y total. Hay hermanas y hermanos desechos moral y socialmente. Se siente un Estado fallido, de violencia generalizada. La muerte está en todas partes, las autoridades voltean para otro lado. Es el reino del crimen, la Maña tiene el poder. Finalmente es lo que muchos perciben: un narcoestado. No hay ley, reina el terror.
La CNTE aportan nuevas fuerzas al caos que envuelve a los mexicanos. Con sus demandas político-económicas, ya que no se preocupan por la educación de los chicos en un sistema educativo en tremenda crisis. Traen otras presiones, finalmente defienden intereses materialistas del gremio.
En el panorama mundial sufrimos también la fuerza de intereses mezquinos, etnocéntricos, finalmente conflictivos: el innombrable exterminio, genocidio de los palestinos de Gaza. La absurda guerra que libran los rusos en Ucrania por la riqueza material de este sufrido país, la intromisión de los monstruos del poder, como el Putin.
La actuación de los policías y servidores del poder en crímenes, los caprichos de Trump, de las locuras de Nicolás Maduro en Venezuela y otros presidentes que resuelven todo con declaraciones como dueños de la verdad. La iniquidad en el poder.
La luz de lo alto.
Han cambiado a la dictadura de un solo partido, consignado en reformas impuestas por un solo poder, y el Ejecutivo ha sometido al poder legislativo, que no legisla sino obedece ciegamente aprobando reformas sin cambiar una coma.
El domingo 1 de junio, en una votación plagada de vicios. Históricamente México es un pueblo que ha luchado por ser una república libre y democrática. Ha costado síglos, muchos conflictos y guerras sangrientas. Hemos realizado un camino de siglos y llegado a una democracia en la que el pueblo es el soberano y nos hemos hecho un régimen de gobierno con instituciones democráticas.
Hay un México demócrata, de ciudadanos preocupados y conscientes que aprecian el tesoro de las conquistas democráticas.
Estos ciudadanos están atentos a los hechos y perciben el cambio que han realizado quienes llegaron al poder y, tras una narrativa de mentira, han controlado todo el poder desde el Ejecutivo. Se consagra el cambio en el poder judicial con una votación que pone a este poder, de facto y por cálculos políticos, bajo el control del Poder Ejecutivo. el naciente poder judicial no se libra de la sombra de Narco.
La Iglesia expresa su juicio explícito y articulado sobre la democracia en la encíclica Centessimus Annus de Juan Pablo II.
Esta gran documento se publica en 1993, a los 100 años de la encíclica Rerum Novarum de 1893. Ahí el Papa León XIII asume el problema social que vive el mundo por la industrialización y los problemas de los patrones con las masas de trabajadores.
El Papa actual León XIV se coloca en esa vertiente para enfrentar el problema social de nuestro tiempo en el mundo de la tecnología, de la producción y el comercio. Pone la misión de la Iglesia en la perspectiva de los problemas sociales en un mundo revolucionado por la tecnología, el confort material y la comunicación automática a través de las redes sociales en los inventos revolucionarios de la electrónica. Es muy significativo que se ponga el nombre de León XIV.
“Por esto mismo,-escribe Juan Pablo II- no puede favorecer la formación de grupos dirigentes restringidos que, por intereses particulares o por motivos ideológicos usurpan el poder del Estado. Una auténtica democracia es posible solamente en un Estado de derecho…."
La doctrina social señala uno de los mayores riesgos para las democracias actuales en el relativismo ético, que induce a considerar inexistente un criterio objetivo y universal para establecer el fundamento y la correcta jerarquía de valores: hoy se tiende a afirmar que el agnosticismo (Claudia se declara agnóstica) y el relativismo escéptico son la la filosofía y la actitud fundamental correspondiente a las formas políticas democráticas y que cuantos están convencidos de conocer la verdad y se adhieran a ella no son fiables desde el punto de vista democrático, al no aceptar que la verdad sea determinada por la mayoría, que sea variable según los diversos equilibrios políticos… (Compendio de la doctrina social de la Iglesia, 406-407 ).
La doctrina social es un baluarte para la preservación de la democracia. Sin estas ideas fundamentales y claras caemos en aberraciones y dictaduras y regímenes antidemocráticos. Pone a la vista la doctrina social graves vicios estamos cometiendo.
AML