El mejor o peor Presidente
Hace días acudí a cortarme el cabello y comenzando una plática con el barbero, con Abraham, en esta ocasión me lanzó la siguiente pregunta: ¿Para Usted cuál ha sido el mejor y el peor presidente del país? En esos momentos… el sillón de la barbería se transformó en un diván, en ese sillón que los psicólogos suelen utilizar y de cliente te convierte en paciente, y así comenzamos una sesión de terapia al primer tijerazo.
Después de reflexionar un poco le conteste; no hay un mejor o un peor presidente, no hay forma de medirlos ente sí, porque estos gobiernan en momentos muy diferentes, y en esas épocas y desafíos cada quien hace lo que puede con lo que tiene. Y así entre tijerazos reflexionamos otras cosas de la vida.
Al día siguiente tuve reflexiones posteriores sobre la misma pregunta, y me reafirmé que no hay peor o mejor presidente, que todo depende de tu percepción personal; de como te fue a ti en esa época, que lograste y que no pudiste hacer, para que te alcanzó y para que no fue suficiente lo que ganaste.
Es algo así como un corte de cabello; te gustó o no te gustó. Si te gusta el corte; lo celebras, presumes y recomiendas, y sino; usaras una gorra y ocultaras la trasquilada hasta el siguiente corte.
Cada presidente en turno va acumulando una serie de acciones que solo ellos saben si son buenas o malas, que por mucho que no nos gusten tienen cierta eficacia. La diferencia es que hoy tenemos un archivo video digital de esas acciones, que en un futuro los podrán llevar a ser recordados como buenos gobernantes, o trasquiladores del pueblo de México.
Hoy podrán ser aplausos y anécdotas, pero el día de mañana podrá ser cárcel por negligentes, y eso es lo que ya comienzan a pedir muchos mexicanos para sus ex gobernantes.
Estimado lector ¿Usted ya fue a cortarse el cabello?
Usted ya tiene el veredicto.
santillan.ricardo@hotmail.com
BCT