Construir sobre amor, verdad y justicia
Amo a la presidente (decir “presidenta” es contra la raíz latina; no se dice "Claudia está presenta". Los mexicanos somos cultos, yo soy latinista).
Amamos a todos los mexicanos, no es una barrera el color político. No distinguimos ni condenamos ni rechazamos a nadie.
Debemos contribuir a un gobierno mejor señalando los problemas, errores, crímenes y traiciones que se entretejen en toda acción humana. Somos seres humanos, limitados, con éxitos y fracasos, errores y aciertos. Estamos por encima de una visión maniquea que atribuye al poder todos los éxitos y virtudes, lo ve todo blanco, y atribuye a la oposición sólo fracasos y maldad, todo lo negro.
El gobierno del presidente Paz, vencedor en las elecciones de este domingo en Bolivia, apostó a la unidad y al reconocimiento del triunfo de los adversarios, si fuera el caso. Nada que ver con un partido que se siente el único bueno, que descalifica a la oposición y siembra la división en el pueblo mexicano, polarizando.
El presidente Trump afirma que el presidente de Colombia (Columbia, escribe él) y lanza amenazas furiosas contra el país sudamericano. Son afirmaciones sin pruebas, como otras que suponían que las lanchas hundidas en el Caribe —basados sólo en la palabra del presidente Trump— por transportar droga. Sin prueba y sin juicio fueron asesinados. Lo mismo sucede con las afirmaciones trumpeanas sobre los crímenes de Colombia; pueden cumplirse las amenazas contra toda verdad y justicia, como los bombardeos de lanchas en el Caribe.
Reconocemos la presencia de la presidente Sheinbaum con damnificados severamente por las lluvias en Veracruz y otros estados. ¡Bravo! No les mostró miedo ni se parapetó mañosamente tras la investidura presidencial. Se ha hecho presente en varios pueblos que han sufrido muertes, desapariciones y la pérdida de su patrimonio.
El Poder Legislativo está reformando la Constitución. No podemos olvidar la forma como se hicieron de la mayoría absoluta. Alguien diría que es un congreso espurio. No hacen procesos legislativos, acatan automáticamente lo que manda el Ejecutivo.
Hay que encarar la realidad de la escuela mexicana: hasta el 90 % de alumnos de tercero de secundaria están reprobados en matemáticas y lenguaje. En tercero de primaria no están mejor (¿¡!?).
Robo espectacular de joyas en el museo de Louvre. Es un crimen contra la riqueza cultural de la humanidad. Es algo muy grave.
Asesinan a Bernardo Bravo, líder de los limoneros de Apatzingán. Es muy triste, una persona valiosa; los criminales atacan a la sombra de la impunidad. ¿Dónde está la autoridad, la fuerza pública que protege y detiene los crímenes?
La comunidad de Opopeo, en una consulta ciudadana, decide administrar sus recursos sin la presidente municipal, Daiana Pérez Mendoza, quien crea grupos de choque. Hay desaprobación de su gestión por su política parcial, que no corresponde a sus funciones y no se ciñe a la ley.
La luz de lo alto
Con esta sana visión avanzamos con dificultad y con limitaciones, pero el camino es seguro, hacia adelante. Con la visión maniquea creamos ilusiones fantásticas que pronto chocan contra la realidad de fracasos, errores. Despertamos de la ilusión vana y abrimos los ojos a la realidad ruda y crítica, habiendo perdido el tiempo.
México necesita ciudadanos que piensan, están atentos a la realidad, que van a las causas de los desastres y son conscientes de lo que dejamos de hacer. No previeron el impacto de las lluvias torrenciales, no se construyeron las estructuras. Gobernar es estar atentos a los problemas y construir el país, tenerlo preparado para cuando venga la catástrofe. No estar indefensos y desprevenidos cuando vengan las catástrofes como las lluvias torrenciales.
Es tarea del gobierno prevenir el futuro. No lo hicieron con los datos meteorológicos del cambio climático. Sabemos que los fenómenos vienen cada vez más violentos.
Deben educar al pueblo, formar su criterio para que sepan distinguir las piedras preciosas de las joyas de fantasía, la demagogia, las narrativas mentirosas... Deben enseñarnos a leer la situación del país, con el retraso, los errores, las traiciones, la demagogia y engaños en la gestión de la cosa pública.
Esta requiere la participación de todos. Es una tarea seria de educación en los valores trascendentes, en la formación de la conciencia moral para defenderse de la mentira, la manipulación, la ventaja e intereses secretos y perversos.
Se deben formar ciudadanos sabios y honestos, virtuosos, para construir una nación sabia, rica, donde reine la verdad, la justicia, para el progreso y la paz.
Los gobernantes deben ser personas sabias, preparadas, no políticos chambistas, buscadores de fortuna, que saltan sobre la oportunidad para escalar puestos y ganar grandes riquezas sin invertir un capital ni arriesgarlo.
Deben ser personas que saben usar su libertad guiados por los principios y valores universales. Deben valorar al otro y amarlo para servirlo y llevarlo al Bien. Es el valor de la persona humana, sus derechos inalienables e inviolables: a la vida, a la fortuna personal, al territorio libre y soberano.
Esta se cuestiona en los grandes arreglos internacionales como el caso de Israel y la banda de Gaza. A un observador atento y conocedor de los seres humanos, no le pasan desapercibidas las limitaciones, la posible hipocresía y los motivos ruines que acechan: Israel rompe el acuerdo y vuelve a bombardear, causando tristemente muchos muertos. ¿Cuáles son realmente las intenciones de Trump?, en realidad, ¿cuál es el fin que persigue?, ¿es realmente el bien de los hermanos palestinos sometidos a bombardeos de muerte?
rmr