Morelia, Michoacán (MiMorelia.com).- La diabetes es una enfermedad crónico degenerativa que afecta a millones de mexicanos, incluso, muchos de ellos sin ser diagnosticados, ya que es un padecimiento que puede ser silencioso. Sin embargo, no representa "el fin del mundo", como bien lo señala Alfonso Yépez, quien ha vivido 22 años dependiendo del fármaco de la insulina.
"La diabetes, por fortuna, no es una enfermedad como el cáncer, que no se puede controlar. Primero debemos aceptar la enfermedad, debemos cuidarnos y no por el hecho de que alguien tenga diabetes debe pensar que ya se acabó el mundo, por el contrario, es echarle ganas", comenta en entrevista para MIMORELIA.COM, el joven que fue diagnosticado cuando apenas tenía 14 años de edad.
Tan solo en la entidad, la Secretaría de Salud de Michoacán (SSM) ha detectado 2 mil 25 nuevos casos en lo que va del 2023. El año pasado fueron 2 mil 261 y a nivel general son alrededor de 20 mil.
Según estimaciones del sector salud, el 30 % de quienes padecen diabetes desconocen su condición, por ello, es importante hacerse revisiones semestrales o anuales y más cuando existen factores de riesgo como los genéticos, es decir, si hay familiares directos con este padecimiento.
"La diabetes se descubrió por primera vez hace más de 2 mil años y si nos vamos a su terminología, diabetes, en griego, quiere decir sifón, haciendo referencia al exceso de orina que se elimina cuando la enfermedad no está controlada y en cuanto a mellitus, en latín, quiere decir miel. Este síntoma nos puede dar una alerta, si el paciente está orinando muchas veces y la orina tiene un olor dulce, es precisamente por la cantidad de azúcar que se elimina en ella", explica la maestra en nutrición clínica y comportamiento alimentario, Mariana Gómez Marino.
La especialista detalla que otros factores que podrían indicar una alerta, es que la persona puede tener algo llamado polidipsia, es decir, que suele ingerir demasiada agua; además, puede presentar poliuria, que es como se llama al exceso de orina; también, algunos pacientes presentan casos de polifagia, es decir, que suele consumir muchos alimentos.
Gómez Marino enfatiza que para prevenir esta enfermedad es de suma importancia que las personas se alimenten adecuadamente y realicen actividades físicas regularmente.
La alimentación debe ser "completa, equilibrada, suficiente, adecuada, variada e inofensiva, es decir, que esté exenta de biomoléculas dañinas para que la persona pueda prevenir la diabetes".
Recomendaría una actividad física, puede ser una caminata al día. Si tienes que ir al súper, trata de caminar; salir con amigas y en lugar de irse a sentar a algún café, hacer una caminata moderada, pueden ir platicando. Hacer ejercicios que les gusten, que no les quiten mucho tiempo", comenta.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) recomienda realizar actividad física aeróbica con una intensidad moderada. Que sea, por lo menos, 5 días a la semana durante 30 minutos, esto puede ayudar a prevenir los padecimientos de esta enfermedad.
"Primero me llevaron con un endocrinólogo. Cuando me dijeron que tenía diabetes tenía 14 años, pero ya cuando realmente me di cuenta de lo que implicaba mi enfermedad fue cuando tenía alrededor de 20 años, cuando ya empecé a sentir cambios en mi cuerpo", recuerda Alfonso Yépez, quien considera que la diabetes en una enfermedad “noble” que se puede tener bajo control.
Si bien, considera que no lleva una vida 100 % saludable, trata de cuidarse y de seguir tres pilares que han sido fundamentales en su vida: tener una dieta adecuada, hacer ejercicio y tomar su tratamiento y dosis de insulina.
No tomo, no fumo y casi no me desvelo, uno debe hacer cambios en su vida, es de cuidarse y con eso sale uno adelante y a seguir con su vida", dice al respecto.
La nutrióloga Gómez Marino señala que lo primero es que acudan con el médico para saber qué tipo de diabetes tienen, puede ser tipo 1, que es la dependiente de insulina; la tipo 2, que es la que no es dependiente de la insulina y suele diagnosticarse antes de los 40 años; además, está la de los niños, pero es rara. "En adolescentes con estratos socioeconómicos bajos ha sido últimamente muy frecuente", alerta al respecto.
Una vez que el médico determina qué tipo de diabetes es, en dado caso de que sea dependiente de la insulina o de algún medicamento, prescribe y posteriormente deben ir con el nutriólogo quien en base a la dosis y tipo de insulina, creará un plan alimenticio.
La receta y conocer la dosis de insulina necesaria, permite al especialista en alimentación saber qué porcentaje y gramos de hidratos de carbono darle al paciente para evitar que tenga hipoglucemia o hiperglucemia, ejemplifica.
"Cada cálculo deber ser individualizado, no podemos prescribir la misma dieta para todo tipo de pacientes porque cada uno es posee una fisiología y mecanismos completamente diferentes al otro", subraya.
La especialista señala que se toman en cuenta varios factores para hacer una dieta para una persona, como las circunstancias personales, las referencias étnicas, culturales y “algo muy importante, la seguridad alimentaria. Que la persona tenga acceso a poder adquirir ciertos alimentos, porque si prescribimos algunos alimentos que son de difícil adquisición para ellos no van a seguir la dieta y declinan”.
Alfonso Yépez y Mariana Gómez coinciden en que la alimentación adecuada, el ejercicio, las dosis y el tratamiento farmacológico necesario, permitirán al diabético llevar una buena calidad de vida.
"Yo practico natación y trabajo en un almacén en donde tengo que estar muy activo, trato de no estar mucho tiempo sentado”, comenta el joven, quien ha aprendido incluso a cuidar de sus otros familiares con el mismo padecimiento.
"Lo que hacemos es que con la alimentación y el tratamiento farmacológico, evitamos que tenga complicaciones médicas más severas, es decir, evitar amputaciones o que la diabetes afecte a algún otro órgano. No tiene cura, pero tiene prevención y sobre todo, se puede mantener a la enfermedad controlada", dice al respecto la maestra en nutrición clínica.
Ante la falta de información, desafortunadamente muchos diabéticos dejan avanzar su enfermedad a grados tales que afecta a otros órganos, puede llegar a causar ceguera o la amputación de algunas extremidades.
Desafortunadamente, para algunos ya es demasiado tarde. De acuerdo con datos del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi), el año pasado fallecieron en el estado 4 mil 695 personas a causa de la diabetes, la mayoría de ellos tenían más de 60 años. El año previo la cifra fue de 6 mil 281 decesos. Esta enfermedad es la segunda causa de muerte a nivel nacional, únicamente por debajo de los decesos por padecimientos del corazón. Por lo que atender sus causas es una prioridad dentro del sistema de salud nacional.
"El tratamiento está en sus manos, nosotros como profesionistas ponemos un 20 %, pero el 80 % restante es de ellos, porque en ellos está cuidar su enfermedad", comparte la especialista, al citar al primer médico en los Estados Unidos que se especializó en diabetes, Elliot P. Joslin, quien dijo, "la educación no es parte del tratamiento, es el tratamiento mismo".
rmr