Morelia, Michoacán (MiMorelia.com).- Las personas que consumen más alimentos ultraprocesados podrían estar acelerando los signos tempranos de la enfermedad de Parkinson, según un estudio longitudinal publicado en Neurology, la revista médica de la Academia Estadounidense de Neurología.
El análisis, que incluyó a 42 mil 853 personas durante un periodo de seguimiento de hasta 26 años, encontró una asociación entre una dieta rica en alimentos procesados y la aparición de síntomas prodrómicos del párkinson, es decir, señales no motoras que pueden anticipar el desarrollo de la enfermedad décadas antes de que se manifiesten los temblores o la rigidez muscular.
Los participantes —en su mayoría profesionales de la salud, incluyendo 25 mil mujeres— fueron evaluados mediante exámenes médicos y cuestionarios sobre sus hábitos alimenticios. Los alimentos analizados incluyeron refrescos azucarados, postres envasados, embutidos, salsas, snacks salados y otros productos industriales.
“Nuestra investigación muestra que comer demasiados alimentos procesados podría estar acelerando los primeros signos de la enfermedad”señaló Xiang Gao, investigador del Instituto de Nutrición de la Universidad de Fudan en Shanghái
Las personas que ingerían 11 o más porciones diarias de ultraprocesados tenían 2.5 veces más probabilidad de mostrar tres o más signos prodrómicos.
Entre estos signos se incluyen: trastornos del sueño, estreñimiento, síntomas depresivos, alteraciones en la visión de colores, dolor corporal y disminución del olfato.
Una sola porción se definía como una lata de refresco, un perrito caliente o una cucharada de kétchup.
Aunque el estudio no prueba una relación causal directa, los investigadores advierten que los patrones dietéticos actuales podrían influir en el riesgo a largo plazo de enfermedades neurodegenerativas.
La investigación resalta la urgencia de adoptar hábitos alimenticios más saludables en México, donde la presencia de alimentos ultraprocesados es alta y el consumo de frutas, verduras y cereales integrales sigue por debajo de las recomendaciones internacionales.
RPO