Morelia, Michoacán (MiMorelia.com).- En el marco de la 22ª edición del Festival Internacional de Cine de Morelia (FICM), la productora mexicana Bertha Navarro fue homenajeada por su destacada trayectoria e inigualable contribución al cine nacional tras 78 años de haber dejado una huella indeleble en la industria cinematográfica, siendo reconocida por su colaboración con grandes cineastas, como Guillermo del Toro, en cintas memorables como Cronos y El Laberinto del Fauno.
Durante el evento, que tuvo lugar en el Centro Cultural Universitario de la Universidad Michoacana, Bertha Navarro recibió el prestigioso trofeo “El Ojo” del FICM, un galardón que tradicionalmente se entrega a los ganadores del festival, no obstante, Alejandro Ramírez, CEO de Cinépolis señaló que en ocasiones se hace una excepción cuando hay tanto que reconocer. Además, en un emotivo acto, develó una butaca en su honor, la cual será integrada a la Sala 4 del complejo Cinépolis en el centro de Morelia, como símbolo de su legado en el festival y en el cine mexicano.
Marina Stavenhagen, próxima directora de la Cineteca Nacional, fue la encargada de resaltar el impacto que Bertha Navarro ha tenido en la industria cinematográfica. “Es una mujer profundamente visionaria y con una trayectoria invaluable”, afirmó, destacando que Navarro no solo ha impulsado su propio trabajo, sino que siempre ha estado atenta a lo que sigue para el cine mexicano. En su labor, ha trabajado con jóvenes talentos, contribuyendo a la formación de nuevas generaciones de cineastas.
En su discurso de agradecimiento, Navarro expresó la profunda conexión que siente con el FICM, destacando su relevancia para el cine nacional. En una entrevista grabada previo a la develación, concluyó diciendo “siempre estaré por ahí cuando se vean mis películas”, haciendo referencia al impacto duradero de quienes se dedican al cine.
Además, reflexionó sobre uno de los principales retos que enfrenta el cine en México: la exhibición. Según la productora, muchas películas mexicanas solo tienen una ventana de proyección de tres semanas “si bien les va”, lo que limita su alcance y visibilidad, haciendo un llamado a mejorar las condiciones para que el cine mexicano de alta calidad llegue a más audiencias.
La labor de Bertha Navarro ha sido clave en la creación de algunas de las obras más icónicas del cine mexicano contemporáneo. Su colaboración con Guillermo del Toro, quien ella misma nombró como “mi hermano”, es solo una muestra de su capacidad para trabajar con artistas y técnicos, creando películas visualmente deslumbrantes que cuentan historias poderosas. Durante el homenaje, compartió una anécdota sobre su relación con Del Toro, quien en su momento quiso que se uniera a su productora. “Le dije que no, que me necesitan más afuera” aseverando que la mente detrás de Pinoccio ya despegó, y emocionó a los asistentes al decir: “yo los necesito a ustedes, yo los necesito como público”.
El FICM, una plataforma clave para el cine mexicano, rindió un merecido homenaje a Bertha Navarro, quien ha sido una figura fundamental en la evolución del cine en el país, y que a decir de sí misma, aún trabaja en dos proyectos más que pronto saldrán a la luz.
SHA