Morelia, Michoacán (MiMorelia.com).- Poco después de medio día, los estudiantes de diferentes universidades en Morelia salieron en marcha este lunes rumbo a Palacio de Gobierno. La manifestación era para exigir justicia por el homicidio del edil de Uruapan, Carlos Manzo, pero también seguridad en Michoacán: los jóvenes retiraron las vallas y rompieron vidrios en el edificio.
Las consignas en contra del gobernador de Michoacán, Alfredo Ramírez Bedolla, no cesaron, en torno a una fallida estrategia de seguridad, pero pronto, el humo del gas pimienta que lanzaron los elementos de seguridad que resguardaban Palacio de Gobierno alcanzó varios rincones del Centro Histórico para replegar a los y las jóvenes e impedir que entraran al edificio.
La cortina de humo blanco dañó físicamente a los estudiantes, y población en general que pasaban por la zona. Algunos hicieron uso del refresco y agua para limpiarse la cara, pero otros tuvieron que alejarse más pues los estragos fueron mayores. Esta mañana el gobernador de Michoacán, lo afirmó: no iban a permitir que causarán destrozos en el recinto.
"Carlos Manzo, tu mensaje no se olvida. No más abrazos", "Mataron al mejor presidente del estado", "Si el pueblo no tiene paz, que arda el estado" y "Callar sería traicionar a quienes confiaron en nosotros", fueron algunas consignas plasmadas en carteles por parte de los presentes.
Previo a la llegada de los manifestantes que salieron desde la Facultad de Derecho y el Monumento a Lázaro Cárdenas, las marchas transcurrían de forma pacífica en las principales avenidas: desde un principio el mensaje fue claro: la revocación de mandato de Alfredo Ramírez Bedolla, y mayor seguridad para la población. Además, cuestionaron la estrategia de seguridad de la presidenta de México, Claudia Sheinbaum Pardo.
Pero al llegar a Palacio de Gobierno, un grupo de jóvenes cubiertos del rostro comenzaron a quitar las vallas que horas antes colocaron los policías, luego, en medio de dicha acción, los elementos de seguridad empezaron a lanzar los gases. La gente corrió para todos lados, y los negocios cerraron, otros levantaron sus mesas de los portales ante los disturbios.
La actividad álgida duró más de dos horas, con varias rondas de gas pimienta intentando dispersar a los manifestantes, pero también resultaron heridos algunos transeúntes que fueron atendidos en el momento. La manifestación se extendió hasta el Congreso, y al filo de las cuatro de la tarde, las cortinas de varios locales seguían abajo. El olor a gas pimienta seguía recorriendo las calles de la ciudad, así como el eco de las exigencias. Hasta el momento las autoridades no han informado si hubo personas detenidas y cuántas lesionadas.
BCT