Morelia, Michoacán (MiMorelia.com).- Durante las fiestas decembrinas es común ver pequeños puestos que ofrecen pirotecnia en los mercados y tianguis; si bien a primera vista parecen inofensivos, su comercialización está prohibida por diversas reglas municipales y federales, principalmente por la Ley Federal de Armas de Fuego y Explosivos.
En Michoacán y al menos tres municipios (Morelia, Sahuayo y Jiquilpan) han prohibido su venta por los riesgos que conlleva, más porque se han registrado casos donde establecimientos y casas han sido quemadas por estos artefactos, poniendo en riesgo la vida de las personas, incluso provocando muertes. Sin embargo, la venta continúa.
MIMORELIA.COM realizó un recorrido por el Mercado Independencia y sus alrededores para ver cómo los comerciantes, sin importar el daño que pueda ocasionar por su mal manejo, desafían a las autoridades con la comercialización de este producto a plena luz del día.
Sin esconderse, los comerciantes buscan atraer a los más pequeños del hogar con las famosas "cebollitas", que aparentemente no le hacen daño a nadie, pero si el manejo es irresponsable, se corre el riesgo de explosión.
Bazukas, cebollitas, barrenos, volcanes, chifladores, palomas... son los atractivos que ponen a primera vista los comerciantes; los más grandes son los interesados en aquellos polvorines de mayor impacto.
La pirotecnia, al estar fabricada con pólvora, está regulada por la Ley Federal de Armas de Fuego y Explosivos, principalmente en su producción, almacenamiento, transportación, venta, compra y uso; es la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) quien debe supervisar el tema, pero son los ayuntamientos quienes tienen que implementar operativos para el retiro de los mismos, en coordinación con la Defensa Nacional.
Durante el recorrido que se hizo el pasado domingo 28 de diciembre, entre las 9:15 y 10:30 de la mañana, al menos seis establecimientos fueron detectados con la venta de pirotecnia; unos al interior del tianguis de "El Audi", donde los vendedores se avisan en caso de que las autoridades lleguen para el decomiso y resguardo de los explosivos, mientras que afuera del Mercado Independencia hay varios puestos que, ni más ni menos, gritan a los cuatro vientos la venta de pirotecnia.
Muchos de ellos se encuentran en la vía pública, muy cerca de donde pasan los vehículos, que en su mayoría es transporte público.
Las consecuencias por el uso de pirotecnia son conocidas por todos; desde la contaminación auditiva y ambiental, hasta las afectaciones a las mascotas y a personas con autismo y enfermedades respiratorias como el asma. También se encuentran las más peligrosas, que conllevan a quemaduras o amputaciones por la explosión de petardos, e incluso la muerte, además de la quema de establecimientos, casas y vehículos.
rmr