Morelia, Michoacán (MiMorelia.com).- A pesar de haber sido notificado desde 2023, el responsable de un predio ubicado en la localidad El Guayabo Sur, municipio de Arteaga, no ha presentado ningún documento que acredite el registro legal ni ha cumplido con los requisitos para regularizar la tenencia de venados cola blanca (Odocoileus virginianus), informó la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa).
De acuerdo con la dependencia federal, el caso inició en septiembre de 2023, cuando el administrador del predio puso a disposición de la Profepa 36 ejemplares que mantenía bajo su resguardo. En respuesta, personal de la Procuraduría realizó una inspección y constató que el lugar no contaba con autorización por parte de la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat), ni podía acreditar la legal procedencia de los animales.
En ese momento, la Profepa aseguró los ejemplares y dejó al predio como depositario temporal, con la intención de que iniciara el trámite para convertirse en una Unidad de Manejo para la Conservación de Vida Silvestre (UMA). Sin embargo, hasta la fecha, el responsable no ha entregado documentación alguna que sustente dicho registro, ni ha cumplido con los lineamientos establecidos por la Semarnat para legalizar el manejo de vida silvestre.
El pasado 17 de mayo de 2025, durante una nueva visita de inspección, autoridades federales y municipales constataron que la población de venados había aumentado a 45 ejemplares por reproducción en cautiverio. Como medida precautoria, se realizó el traslado de 39 ejemplares a dos predios autorizados, que cuentan con instalaciones adecuadas y plan de manejo aprobado por Semarnat. Seis venados permanecen en el sitio original debido a complicaciones logísticas para su reubicación inmediata.
El procedimiento fue llevado a cabo por personal de la Profepa, del Zoológico de Morelia, de la UMA San Francisco Uruapan y de la Policía Municipal. Todos los ejemplares fueron anestesiados bajo estrictos protocolos veterinarios y recibieron atención médica tras su reubicación.
La Profepa reiteró que la posesión, manejo o exhibición de ejemplares de vida silvestre sin la debida autorización constituye una violación a la legislación ambiental mexicana, y puede derivar en sanciones administrativas como multas y decomisos.
AML