Morelia, Michoacán (MiMorelia.com).- Con poca afluencia de artesanos al exterior de los templos del centro histórico de Morelia, transcurre el tradicional Domingo de Ramos con el que se da inicio a la celebración religiosa de Semana Santa.
En recorrido por el primer cuadro de la ciudad, se pudo constatar que sólo en algunos centros de oración católica se instalaron artesanos de palma originarios de la zona lacustre de Michoacán y del Estado de México.
Desde temprana hora niños, jóvenes y adultos trabajaron en distintos ornamentos religiosos tejidos a mano para que feligreses pudieran adquirirlos antes de ingresar a los templos y revivir la llegada triunfal de Jesús como mesías de acuerdo a la tradición cristiana.
Los costos de cada palma varían entre los diez y 25 pesos según su tamaño y elaboración, comentó Eduardo Gómez, joven que ayuda a su madre con la venta de Ramos provenientes del Estado de México.
En tanto, los templos que mayor aforo de visitantes registraron antes del mediodía fueron la Catedral de Morelia y San Francisco, mientras que otros como San Diego, Las Monjas, Las Rosas, San José y La Cruz alcanzaban entre el 20 y 30 por ciento de su capacidad.
Por: Aned Ayala/E