Morelia, Michoacán (MiMorelia.com).- La principal causa del trágico accidente que le costó la vida al futbolista portugués Diogo Jota fue el exceso de velocidad, confirmó este lunes la Guardia Civil de España, tras analizar los restos del vehículo y las condiciones del siniestro.
El delantero del Liverpool y de la Selección de Portugal conducía un Lamborghini Huracán la madrugada del 3 de julio de 2025 sobre la autovía A-52, en el tramo cercano a Cernadilla, Zamora, cuando perdió el control del vehículo. Junto a él viajaba su hermano, quien también murió en el acto.
De acuerdo con los reportes de medio, Jota manejaba muy por encima del límite de 120 km/h permitido en la vía, cuando una llanta trasera reventó durante una maniobra de adelantamiento.
El auto impactó contra las barreras de contención, y el depósito de combustible explotó, provocando un incendio que calcinó completamente el vehículo y los cuerpos de ambos ocupantes.
Las huellas de frenado, los restos mecánicos y el tipo de derrape en el asfalto fueron clave para que los peritos concluyeran que el exceso de velocidad fue el factor decisivo en el choque fatal.
Los peritos forenses confirmaron que Diogo Jota conducía el automóvil. La identificación se basó en pertenencias personales encontradas dentro del vehículo y características anatómicas compatibles, actualmente en proceso de comparación biométrica.
Se descartó que el coche fuera un modelo SUV como el Urus —frecuente entre futbolistas—, y se confirmó que se trataba de un Huracán, un deportivo de tracción trasera altamente sensible a reventones de llantas y difícil de maniobrar a altas velocidades.
Excompañeros como Raúl Jiménez han dedicado mensajes de despedida al jugador, cuya muerte ha sacudido al entorno deportivo internacional.
El caso de Diogo Jota reabre el debate sobre la conducción temeraria en autos de alta gama, un fenómeno recurrente entre figuras públicas que a menudo termina en tragedia.
mrh