Morelia, Michoacán (MiMorelia.com/RED 113).- El helicóptero de la Procuraduría General de Justicia del Estado (PGJE) que se desplomó en la demarcación de La Huacana la tarde-noche del martes 6 del presente mes no fue derribado por impactos de proyectil de arma de fuego, sino que todo se trató de un accidente aéreo, así lo reveló el peritaje oficial de un ingeniero en aeronáutica, dependiente de la Procuraduría General de la República (PGR), documento al que esta agencia de noticias tuvo acceso.

El estudio está firmado por el profesionista Raúl Sánchez Hernández y revela textualmente en su apartado denominado "Conclusión": "De acuerdo a la información oficial consultada, a la inspección del lugar del accidente, al análisis de los restos de la aeronave, a las necropsias oficiales, a las declaraciones de los testigos, se concluye que la causa del accidente de la aeronave marca Airbus, modelo 350 AS, número de seria 8251, matrícula de la aeronave oficial o de estado XC-LOV (Extra, Coca, Guion, Lima, Oscar, Víctor), perteneciente al Gobierno del Estado de Michoacán, ocurrido en fecha 06 de septiembre del presente año en la comunidad del Cháuz, perteneciente a Zicuirán, municipio de La Huacana, Michoacán, se debió a que durante un vuelo de seguridad el capitán de la aeronave advierte un peligro por presunta agresión con armas de fuego, por lo que para alejarse del peligro, realiza una maniobra llamada de regresión retornar sobre la trayectoria que tenía.

"Debido a la situación de altura y velocidad que tenía la aeronave en ese instante, no es posible completar totalmente la maniobra, haciendo contacto el tren de aterrizaje con el terreno y posterior impacto del fuselaje contra el terreno. A consecuencia de la rotura de los tanques de combustible, éste se derrama y hace contacto con alguna parte caliente del motor o con alguna chispa del sistema eléctrico de la aeronave originándose un incendio.

"La causa del deceso de los ocupantes de la aeronave fueron descritos y coincidentes con el impacto contra el terreno y por el fuego, no se encontraron elementos balísticos en las necropsias que indiquen algún daño a los ocupantes por proyectil de arma de fuego, de la misma manera al efectuar el análisis detallado de los restos de la aeronave no se encontraron impactos de bala en ninguna parte del fuselaje o del motor de la aeronave, en el lugar de los hechos se encontraron cartuchos explotados por la acción del fuego y pertenecían al personal de a bordo de la misma aeronave accidentada".

También, al principio del papel habla de las necropsias: "Las necropsias efectuadas por el Servicio Médico Forense del Gobierno del Estado de Michoacán, indican que la causa del deceso de las personas fueron directamente relacionados con el impacto de la aeronave contra el terreno, así como lesiones mayores por fuego, ninguna de ellas presenta lesiones por proyectil de arma de fuego".

Cuenta además con un subtítulo llamado "Declaraciones de los testigos la aeronave": "Las declaraciones testimoniales oficiales de las personas que se encontraban a bordo de otra aeronave de la Policía del Estado de Michoacán, que se encontraba en ese momento en el área, indican que la aeronave efectuó una maniobra llamada regresión, sin completarla, impactándose contra el terreno".

El día de los hechos y los que le siguieron se creía que el helicóptero había sido derribado por unos gatilleros, versión que incluso se reforzó con una publicación del Twitter oficial del gobernador del estado, Silvano Aureoles Conejo (@Silvano_A), dada a conocer la fecha del accidente, en la que se leía: "En apego a la responsabilidad de proteger a los ciudadanos, estado y federación no cederán en la lucha frontal contra la delincuencia. En la región de Apatzingán se mantiene un operativo enfocado a la detención de líderes de células delictivas. En la acción operativa ha sido derribado un helicóptero oficial que apoyaba el patrullaje en una zona de difícil acceso".

Aunado a lo anterior las fuertes declaraciones contra el crimen organizado que hizo el mandatario estatal daban más sustento a la teoría inicial y otro tuit suyo aparecía el día del homenaje a los agentes fallecidos (el miércoles 7 de los corrientes): "Reitero mi compromiso de no dejar impune este lamentable acto. No pararé hasta dar con los responsables".

No obstante, ahora con los peritajes las dudas han quedado despejadas y los expertos han determinado que todo se debió a una maniobra malograda ante el peligro de una posible agresión a tiros, sin embargo el acontecimiento sí es una prueba fehaciente de la delgada línea que existe en el duro trabajo policial de retornar o no a casa en esa peligrosa, noble y muchas veces menospreciada labor por la misma sociedad. Descansen en paz los cinco policías muertos en cumplimiento de su deber: Mario Ángel Lima Gallardo, Martín Domingo Piccaso, Julio Morales Govantes, Yesid Ibáñez Miranda y el piloto Fernando López Valdez.