Morelia, Michoacán (MiMorelia.com).- Correr no solo es una forma popular de ejercicio, también es una puerta a una vida más saludable. Ya sea por salud, estética o bienestar mental, este hábito puede transformar tu cuerpo de maneras profundas y positivas.

Correr es una de las actividades físicas más completas, accesibles y efectivas para mejorar el bienestar. Incorporarlo a tu rutina diaria puede significar una mejora significativa en tu calidad de vida. A continuación, te compartimos cinco formas en que tu cuerpo cambia cuando corres:

Un corazón más fuerte y resistente

Correr mejora la salud cardiovascular al fortalecer el músculo cardíaco y favorecer la circulación. Reduce la presión arterial, mejora la oxigenación del cuerpo y regula el colesterol, aumentando el “bueno” (HDL) y reduciendo el “malo” (LDL).

Aliado del control de peso

En una hora puedes quemar entre 300 y 800 calorías, dependiendo de la intensidad. Esto, sumado al impulso metabólico que genera, convierte al running en un método eficaz para bajar de peso y mantener una figura saludable.

Músculos firmes, huesos fuertes

Este ejercicio trabaja intensamente piernas, glúteos y abdomen, fortaleciendo tanto músculos como huesos. Además, el impacto moderado sobre el esqueleto ayuda a prevenir enfermedades como la osteoporosis.

Mente clara, ánimo alto

Las endorfinas liberadas al correr son potentes reguladores del estado de ánimo. Reducen el estrés, combaten la ansiedad, mejoran el sueño y pueden ayudar a superar la depresión. Correr es, para muchos, una forma natural de terapia emocional.

Más energía para tu día a día

Conforme se adquiere el hábito, la capacidad pulmonar mejora, la fatiga disminuye y la energía general aumenta. Muchas personas reportan sentirse más productivas y con mayor motivación después de empezar a correr regularmente.

RPO